Villeroy & Boch, una experimentada empresa alemana con 24 plantas de producción que su mayoría se encuentran en Europa, nos presenta su última colección para el cuarto de baño. No es una colección cualquiera porque aúna todo lo que una cabeza pensante podría desear. Y con eso no solo me refiero al diseño, que es lo que nos entra por la vista. Me refiero también a la funcionalidad, que es lo que hace que nuestro día a día sea más cómodo, y a sus posibilidades de personalización, las mismas que nos permiten satisfacer nuestras necesidades más racionales e irracionales.
Equilibrio y sutileza
Todos los elementos de diseño de Venticello, que es como se llama la colección, conviven en armonía. La estética general, basada en la cerámica de calidad empleada por el fabricante, es de lo más agradable del mercado. Líneas sencillas y delicadas que ocupan las partes más importantes del cuarto de baño con un objetivo muy bien definido.
Los lavabos-encimera lucen un perfil de 18 milímetros que es perfecto para hablar de elegancia. Si a eso le sumamos los 120 milímetros de profundidad, hay que dejar a un lado los adjetivos meramente estéticos para empezar a hablar de algo práctico.
Inodoros aventajados
Podemos continuar con los tres inodoros disponibles. Todos ellos equipan la tecnología DirectFlush presentada en 2013 por Villeroy & Boch. Ésta vela por la higiene, la eficiencia y el diseño. Por la higiene por el simple hecho de limpiar todas las paredes del inodoro de forma rápida y completa (desaparece el borde interno). Por la eficiencia porque consume entre 3 y 4,5 litros de agua, que son unos 6 litros menos de lo habitual. Y por último, pone énfasis en el diseño para que no desentone con el resto de piezas de la colección y pueda considerarse uno de los más vanguardistas del momento.
Espacio para lo que necesites
Los muebles del baño no rompen los esquemas lineales establecidos para el resto de piezas que componen Venticello. Son de diseño ligero, de materiales de gran fiabilidad y están preparados para cubrir todo tipo de necesidades mundanales. Además, puedes elegir entre múltiples colores y tamaños, así que no tendrás problemas para integrarlos en tu baño.
La altura de los armarios bajos puede ser de 42 o de 59 centímetros, con uno o dos cajones en proporciones de 1/3 y 2/3. Dicho esto, queda claro que el orden está garantizado si se es un poco cuidadoso a la hora de guardar los productos utilizados en esta estancia tan personal.
Venticello es una colección que ha visto la luz siguiendo las tendencias, algo que se manifiesta en detalles como los lavabos-encimera asimétricos, los asientos de inodoro planos o las holgadas superficies de apoyo. Puedes comprobarlo tú mismo accediendo a su catálogo, donde se recoge información específica sobre dimensiones y acabados.