El loft se trata de una vivienda moderna formada por un espacio diáfano, con pocas divisiones entre espacios, que suele disponer de dos alturas y grandes ventanales para una buena iluminación. Su origen lo encontramos en el Nueva York de los años 50, cuando jóvenes artistas se instalaron en almacenes abandonados debido a los altos precios de las viviendas, una situación muy actual a la similar. Sin embargo, la diferencia es que vivir en este tipo de viviendas se considera un pequeño lujo en la actualidad.
Decorar un loft puede ser algo complicado si no se tiene una orientación, puesto que al no tener paredes para diferenciar las distintas habitaciones, es preciso integrar. De ese modo, todo el mobiliario quedará a la vista, el caso es que dividir los ambientes se convertirá en una misión costosa. No obstante, existen ciertos estilos que son perfectos para este tipo de apartamentos, como el industrial, el minimalista o el contemporáneo. Seguro que algunas vez ya has leído sobre ellos en este mismo blog.
Te recomendamos aprovechar al máximo las grandes paredes para colocar cuadros o fotografías de gran tamaño, incluso espejos. Las fotografías en blanco y negro de ciudades importantes, como París o Nueva York, son perfectas para un loft, ya que el color de las paredes suelen ser de tonos neutros como el gris o el beige. Este tipo de decoración es realmente interesante y muy versátil.
Respecto al mobiliario, recomendamos escoger piezas de grandes dimensiones para aprovechar el enorme espacio del que disponemos, pero siempre con cuidado de no sobrecargarlo. En el centro del apartamento es ideal situar los muebles más bajos, como una mesa de centro y varios sofás, dejando las librerías y armarios pegados a la pared. En este sentido lo importante es mantener esa amplitud visual que caracteriza un loft moderno. Otra opción también buena es utilizar los propios muebles para crear varios ambientes.
La iluminación será clave para decorar un espacio tan amplio. A parte de la natural que entra por las ventanas, es ideal colocar estratégicamente diferentes posibilidades tales como lámparas de mesa, de pie y de pared. Con la propia luz podemos jugar para crear efectos decorativos, potencia los rincones más bonitos o podemos crear diferentes espacios sin la necesidad de paredes.