Hoy vamos a hablar de una de las zonas más importantes del hogar y, sin embargo, una de las más olvidadas. Nos estamos refiriendo al recibidor, que sirve como una especie de carta de presentación del resto de tu vivienda. Y es que ya sabes lo que dicen, ¿verdad? ¡La primera impresión es la que cuenta!
Además de servir de preludio de lo que va a encontrarse en el resto de la casa, el recibidor es el espacio que nos despide cada día al salir de casa y nos recibe cada vez que llegamos. Por todo ello, es importante que lo decoremos con la importancia que se merece. No importa lo pequeño o poco luminoso que sea, siempre hay soluciones para que el resultado sea el de una zona acogedora y práctica. Hoy en Decorablog te contamos algunos trucos para decorar el recibidor. ¿Te apetece acompañarnos?
Colores
¿Qué te parece si comenzamos hablando de los colores? Desde luego, la elección de los tonos que formarán parte de los distintos elementos del recibidor es una de las claves para tener éxito en la decoración de este ambiente. Al tratarse de espacios que suelen ser pequeños y poco luminosos, lo que nosotros te recomendamos es que optes por los colores claros para paredes, ya que te ayudarán a ampliar el espacio y a aumentar la claridad. Por supuesto, podrás escoger muchos más colores que el blanco: beige, crema, piedra… Lo importante es que con el tono escogido logres una correcta transición armónica con las áreas que relaciona. Un buen truco si cuentas con el techo bajo es pintarlo de un color más claro que el de las paredes. Podrás añadir toques de colores más llamativos mediante los detalles decorativos.
Muebles
En cuanto a los muebles, lo ideal es que tu recibidor cuente con pocas pero prácticas y decorativas piezas. Lo importante es que el espacio quede despejado para que se pueda entrar a tu vivienda de forma cómoda. Lo ideal es que el ancho de paso sea de unos 90 centímetros. Así, si vas a decantarte por colocar una pieza de mobiliario en esta zona de la casa, es importante que las medidas del fondo se adapten a las dimensiones del lugar. Además, debes tener en cuenta que los elementos deberán situarse en la parte derecha y hacia adelante, ya que es ahí hacia dónde va nuestra mirada al entrar en cualquier lugar.
Piezas prácticas
Como te acabamos de comentar, lo ideal es que escojas piezas prácticas, especialmente si tienes una vivienda donde los metros cuadrados brillan por su ausencia. Entre los elementos más útiles encontramos los paragüeros, vacía-bolsillos, percheros, consolas, aparadores, zapateros y espejos. Esta última pieza no solo es súper práctica para mirarnos antes de salir de casa, sino que resulta de lo más funcional a la hora de ampliar el espacio visualmente y de sumar luminosidad al lugar. Si tienes espacio suficiente, también es una buena idea colocar un asiento, ya que le dará al recibidor un toque decorativo de lo más atractivo. Además un banco, una silla o una butaca resultarán de lo más útiles para calzarte con comodidad.
Iluminación
Una de las claves para que tu recibidor resulte un lugar de lo más práctico y acogedor es que cuente con la iluminación adecuada. En este sentido, es muy importante tener en cuenta que este espacio suele recibir poca luz natural. Por tanto, un buen truco es optar por puertas con cristales que permitan la entrada de la luz de las estancias contiguas. Por supuesto, deberás prestarle especial atención a la luz artificial, pudiendo escoger desde lámparas de sobremesa, hasta luminarias de pie pasando por apliques de pared. Lo esencial es que aporten una luz indirecta suave y agradable. Un buen truco es optar por sensores de presencia, que te ayudarán a ahorrar en la factura de la luz.
Continuidad
Por último, es importante que haya continuidad entre el recibidor y el resto de estancias. Lo podrás conseguir a través del suelo, de los colores o del estilo decorativo.