La despensa es un lugar de la casa con un papel protagonista en nuestra vida diaria. De ahí la importancia de tenerla bien organizada para encontrar el alimento que buscas. Esto no quiere decir que se tenga que renunciar a hacer atractivo este lugar del hogar.
El tamaño de la despensa normalmente va en función del tamaño de la casa. En viviendas grandes, la despensa puede llegar a ocupar una habitación. Mientras que en las casas más pequeñas, la despensa puede ocupar solo un armario o encimera.
La despensa es una zona que requiere bastante capacidad de almacenaje. Sea el lugar en el que se ubique, la despensa ha de ser de fácil acceso. Y en ella se han de ordenar los alimentos en baldas o rejillas para mayor comodidad del usuario. ¿Cómo te gustaría decorar la tuya? A continuación te detallamos tres estilos diferentes.
Rústica, moderna o vintage
Si la despensa está integrada en la cocina, hay que esforzarse al máximo por que ésta no desentone con la decoración de la cocina. Imaginemos que tienes una cocina rústica. Dale un aspecto campestre a tu despensa combinando estanterías de obra con azulejos de cerámica. Las baldas de madera cerradas con celosía o los cestillos de mimbre también sirven para aportar al armario un toque más rústico.
Para las cocinas modernas, la despensa ha de ser mucho más simple. Basta con forrar el fondo del armario con un papel colorido que combine con el resto de la decoración. En esta ocasión, las baldas que coloques han de ser de acero inoxidable y si cuelgas cestos en la despensa, que sean de plástico.
Otro estilo que se lleva mucho ahora es el vintage. Si prefieres darle a la despensa un toque vintage, coloca visillos de picos en las baldas. Normalmente se suelen elegir telas de un mismo estampado, aunque hay quien combina dos o tres tipos de estampados distintos. El resultado es el mismo. Completa la decoración con botes de cristal. Darán un aspecto más retro al armario.