Los toldos pueden ser una de las opciones más prácticas si buscas una cubierta para tu terraza, jardín o pérgola ya que se pueden abrir o cerrar con facilidad, además de ser más económicos que otras opciones y haber una gran variedad de modelos y acabados que se intengran en cualquier entorno. Muy importante también destacar que ayudan a que la temperatura baje entre 8 y 15ºC, con el consiguiente ahorro económico y un confort al aire libre envidiable.
Los toldos más prácticos son los que tienen brazos extensibles articulados, que mantienen la lona tensada cuando están abiertos, y al plegarse, quedan recogidos bajo la tela. El sistema monoblock permite mantener más puntos de apoyo para toldos de grandes superficies o el sistema de brazos cruzados, que se utiliza cuando la longitud de la línea limita la salida del toldo.
También existen sistemas de accionamiento automático, fijos o con mandos a distancia, así como sensores que abren y cierran el toldo en caso de lluvia o al detectar una cantidad de luz o velocidad de viento determinada. Esta instalación permite múltiples variedades y son las más adecuadas para terrazas y jardines. Se cuenta con diferentes estructuras entre ellas las de madera. La verdad es que los avances técnicos en este sentido están siendo muy prácticos y funcionales.
El elegante diseño dará ese toque que buscas y su práctico manejo hará más fácil y llevadero el verano disfrutando de tu jardín todavía más gracias a poner un toldo en la pérgola. Esta estructura de madera a modo porche quedará ideal brindando sin lugar a dudas elegancia y distinción. Una de las ventajas de pérgolas que utilizan una pared como apoyo es la integración con la construcción preexistente, así como la caída de agua, que se hace en un solo sentido, simplificando esta característica. Dependiendo del tipo de pérgola que tengas puedes también optar únicamente por una lona que te cubra la parte superior.