No llegará hasta septiembre, pero IKEA no ha podido esperar más y nos ha mostrado las primeras imágenes de SINNERLIG. Se trata de una colección que han creado junto a la diseñadora y decoradora de interiores Ilse Crawford. Se han dejado llevar por su experiencia y les ha parecido bien utilizar el corcho como material protagonista de las más de 30 piezas que la forman.
Un material destacado
El corcho es un material renovable, resistente al agua, fácil de limpiar, duradero y capaz de suavizar el sonido. Por eso, visto lo visto en esta colección, puede utilizarse para crear fantásticos muebles y complementos que podemos colocar tanto en interiores como en exteriores sin miedo a que se echen a perder.
Desde el principio hasta el final, quienes han colaborado en esta colección han aportado su experiencia a la hora de utilizar el corcho. Es el caso de la empresa Studioilse, pero también de los proveedores de materiales y otros fabricantes externos que han decidido arrimar el hombro por un bien común.
Innovación y evolución a través del conocimiento
A IKEA le gusta innnovar. Le gusta apostar por materiales que permiten fabricar productos económicos sin comprometer al medio ambiente. Marcus Engman, IKEA Suecia Design Manager, explica el porqué de estas asociaciones puntuales que dan lugar a todo tipo de colecciones:
Para evolucionar, ser interesantes y crear buen diseño al alcance de todas las personas, necesitamos grandes colaboradores con los que podamos comprometernos en proyectos inspiradores.
Ilse e IKEA se han visto las caras más de una vez para trabajar en la concepción de SINNERLIG. Han viajado a China, Vietnam, Polonia y Portugal, donde se han podido empapar de todas las posibilidades que existen a la hora de dar forma al corcho. Es un material natural que hay que saber cómo integrar en un proceso de fabricación industrial para que nada falle, motivo por el cual decidieron visitar países donde están acostumbrados a trabajar con él.
Productos que se adaptan al hogar
A pesar de que el corcho es un material que estamos más acostumbrados a ver en botellas de vino y pizarras en las que pinchar unas cuantas hojas, la firma sueca y la diseñadora han sido capaces de crear una serie de accesorios a los que es muy fácil acostumbrarse. Conectan rápidamente con el entorno gracias a la belleza y el tacto del material, al tiempo que muestran una serie de imperfecciones del proceso de producción que hace que sean todavía más deseables.
Para que tengamos más claro qué productos son los que nos convienen, han decidido dividir la colección en tres catergorías: trabajo, comedor y descanso. Así, encontramos una mesa caballete, taburetes, un sofá cama, una mesa de comedor, lámparas… Resulta curioso lo que han sido capaces de diseñar, entre otras cosas porque estoy convencido de que los precios de venta serán muy competitivos.