La gran mayoría de los mortales no podemos comprarnos un avión del tipo Boeing 737. Sin embargo, gracias al ingenio de empresas como Fallen Furniture, como mínimo podemos aspirar a tener una parte de él en casa.
Lo que han hecho ha sido diseñar una silla reciclando una de las cubiertas de los motores de ese modelo tan popular en el sector de la aviación comercial. No me preguntéis de dónde la han sacado porque no tengo ni idea y no nos facilitan información al respecto en su página web.
Con forma de huevo y materiales de calidad
Como puedes comprobar en las imágenes que ilustran este artículo, el resultado final es muy parecido al de esas sillas con forma de huevo que todavía son capaces de conquistarnos. Lo que no sabemos es si con ella podrás salir volando, pero me temo que no tendrá los poderes mágicos de la alfombra de Aladdín.
El carenado frontal del motor se exhibe en una mezcla de negro y cromado que debes decidir si encaja en el salón o en la habitación donde lo vayas a colocar. El asiento, como es lógico, es todo lo blando que puedas imaginar y está forrado en cuero de alta calidad, así que en ese sentido es bastante más cómodo que la mayoría de asientos de cualquier avión (desconozco si en la clase business se viaja en asientos mejores). Por último, la base que le han colocado es de aluminio entallado.
Su precio se antoja prohibitivo
Sus creadores te invitan a dejar tu nombre, dirección de correo y número de teléfono para que puedan ponerse en contacto contigo. Puede que esté a la venta, pero imagino que el precio será astronómico y no habrá demasiadas unidades disponibles, así que no te hagas muchas ilusiones por si las moscas.
