Los salones son espacios donde mejor podemos lucir el estilo minimalista, ya que es el lugar donde más vida hacemos y donde nos reunimos para pasar la tarde con los amigos, por lo que una decoración sencilla, práctica y funcional es la combinación ganadora. En ocasiones la cantidad de objetos decorativos y libros nos impiden darle a esta habitación el estilo sobrio y elegante que buscamos. Para solucionar este problema te recomendamos pensar qué muebles son fundamentales y prescinde de todos los demás. Lo ideal es que todos sean de líneas rectas y colores sólidos o neutros. Deja las paredes desnudas o bien decóralas con un par de cuados o un original vinilo. La iluminación es fundamental, si tienes grandes ventanas, coloca unas cortinas blancas que dejen entrar la claridad natural. Respecto a los colores, la combinación perfecta es blanco-negro, pero también se pueden introducir otros colores como el rojo o el violeta.