¿El baño de tu casa te está pidiendo a gritos un cambio? Si hace años que no prestas atención a sus necesidades, es probable que no te hayas dado cuenta de que necesita un lavado de cara, una nueva imagen para evitar problemas como el de humedad y para resultar más atractivo a la vista.
Afortunadamente, no hace falta tener una fortuna para poder actualizarlo como es debido. Simplemente hay que seguir una serie de consejos para que esta estancia tan importante cambie casi por completo. Toma nota porque es muy fácil.
Actualiza los colores: Dependiendo del dinero que te puedas gastar, trata de añadir nuevos colores o cambia los que tenías. Dale vida al baño apostando por colores alegres o busca la relajación en otros tonos más apagados y no por ello menos recomendables. Los tonos marrón, verde, azul y beige son los más solicitados, sobre todo si quieres acercarte al estilo Zen, ese que muchas personas buscan con insistencia. Moderniza la paleta de colores teniendo en cuenta otros elementos que no tiene que ver con la pared como por ejemplo las toallas de baño.
Lleva a cabo tú los cambios: Es muy cómodo eso de llamar a un profesional para que te lo haga todo. Sin embargo, recuerda que para ahorrar el máximo deberás buscarte la vida por tu cuenta. Si sabes un poco de bricolaje podrás cambiar muchas cosas sin gastar dinero. Puedes encargarte tú de pintar o simplemente decantarte por la colocación de paneles. Los accesorios de plomería tales como grifos los puedes cambiar en poco tiempo. Acércate a la ferretería más cercana y adquiere todas las novedades que necesites. Actualiza tanto el lavabo como la cabina de ducha.
Apuesta por la restauración: Muchas veces no es necesario cambiarlo todo por completo. Si tienes el típico baño decorado al estilo clásico, apuesta por la restauración del mismo y trata de cambiar lo mínimo posible. Puedes mejorar su aspecto de muchas formas manteniendo esa esencia que desde siempre ha caracterizado a tu baño. Algo actualizado no siempre tiene que ser nuevo, es importante tener eso en mente.
Divide la renovación en fases: Aunque seguramente te gustaría renovarlo todo de golpe y en un fin de semana, tienes que tener en cuenta que todo lleva su tiempo. Además, es probable que por presupuesto no puedas hacerlo todo de golpe, así que relájate y empieza por lo más básico. Empieza por las paredes y termina por el suelo, pues es probable que tengas que hacer obras. Planifícalo todo a medio y largo plazo para mantener el control del presupuesto.