Si hace poco os mostrábamos una espectacular villa situada en Marruecos, hoy tenemos que hacer lo propio con una mansión ubicada en el mismo país que no tiene nada que envidiarle. Está claro que en el norte de África también saben lo que es vivir bien. Lástima que estos placeres estén reservados para unos pocos privilegiados.
Está situada en Palmeraie (Marrakech) y cuenta con unos 1.200 metros cuadrados de superficie. El diseño ha corrido a cargo de Habib BerdaÏ y la decoración se ha encomendado a Gil Dez. A primera vista, destaca su imponente pisicna de 20 x 8 metros situada en frente de la fachada de la casa principal. Su terraza privada y su excelente iluminación hacen que el relax esté asegurado a cualquier hora del día.
La piscina al aire libre, secundada por hermosas palmeras, no es lo único destacable de esta mansión. Las habitaciones, con una ligera influencia árabe, son muy espaciosas y están decoradas con mucho mimo. El salón es espectacular y se conecta con el comedor para recibir a una gran cantidad de invitados.
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