Comenzamos el año viajando hasta Monterrey (México) para conocer una vivienda que se ubica en las zonas más privilegiadas de esta ciudad, ya que desde esta casa es posible disfrutar de unas increíbles vistas de la Sierra Madre Oriental. Se trata de una construcción de 550 metros cuadrados obra de los arquitectos Gilberto L. Rodríguez y Alberto Campo Baeza que hoy vamos a descubrir desde dentro. Un remanso de luz y paz que nos hace pensar que estamos ante una moderna interpretación de la Domus Aurea.
Homenaje al arquitecto mexicano Barragán
Según explican estos arquitectos, la vivienda es un homenaje al arquitecto mexicano Barragán, en cuyas creaciones la luz está siempre muy presente. En este proyecto, esta luz se convierte en una luz dorada, debido al reflejo que se crea en un muro de hoja de oro que está ubicado en la sala de lectura, y que también es un homenaje a otro artista, en este caso, a Mathias Goeritz. Esta luz llega a todos los rincones de la casa y proporciona un toque muy especial a la vivienda.
Unión de dos espacios
Este proyecto se basa en la conexión de dos espacios unidos con doble altura que terminan creando tres niveles conectados. En el nivel intermedio vemos el muro con hoja de oro que hemos comentado antes, en el que incide la luz que llega desde el sur y que refleja en la azotea y en la planta baja.
La cocina y el salón
La cocina es blanca, con una gran nevera doble y un elegante cuadro que decora una de las paredes, otorgando a la estancia un bonito contraste de color. Destaca su lámpara central, formada por varias bombillas colgantes, y la isla con taburetes donde poder disfrutar de un reconfortante desayuno o donde hacer compañía a la persona que está cocinando. Unido a ella se encuentra la zona de estar, con sofás y plantas que dan a este lugar un aire muy acogedor. Los espacios, a pesar de estar unidos, se encuentran perfectamente diferenciados.
Colores y materiales
Echando un vistazo a las distintas estancias de esta casa de Monterrey apreciamos que el uso del mármol está bastante extendido, ya que lo vemos desde la puerta de entrada, en la zona de bar que hay en el salón y también en los baños. En cuanto a los colores, el blanco está presente ya en la fachada exterior, y se traslada hasta dentro para diseñar unos espacios acogedores y muy luminosos.
La distribución de las diferentes zonas
En la planta de abajo de esta vivienda están ubicadas las áreas comunes y más públicas como pueden ser la cocina, el comedor o el salón. En la siguiente planta están las habitaciones y una sala de lectura que sirve de unión para los diferentes espacios y que también se asoma hacia la planta baja. Finalmente, en la azotea está la piscina, que por un lado da a la sala de lectura del nivel intermedio con su muro dorado, y hacia el otro lado se puede disfrutar de las vistas a la Sierra Madre Oriental.
Los dormitorios
Unos de los espacios más confortables de esta casa son los dormitorios. En las fotografías vemos tres diferentes, decorados en tonos blancos y grises y con distintos formatos de camas.
Galería de fotos
Ya te hemos contado cómo es esta casa mexicana y ahora te invitamos a que la conozcas con tus propios ojos a través de las fotografías de Javier Callejas Sevilla. Como verás, se trata de una vivienda muy luminosa y acogedora, con muchos detalles y donde la luz es la auténtica protagonista de los espacios.
