Estamos en época de exámenes, una temporada que trae de cabeza a todos los estudiantes: los que se están sacando la ESO, los que tienen la Selectividad, los que están haciendo lo exámenes finales de la carrera… Si te encuentras en esta situación o tienes un hijo que está pasando por este mal trago, lo mejor es que cuentes en casa con una zona de estudio que permita una buena concentración.
Una de las claves para tener éxito a la hora de estudiar es disponer de una buena iluminación. Lógicamente, la luz natural es perfecta para este fin, aunque también es importante contar con una iluminación artificial de calidad, tanto para las noches de estudio en vela como para los días nublados en los que entra poca luz natural en casa. Hoy en Decorablog queremos darte las claves para que los estudiantes cuenten con una buena iluminación durante todo el año y, especialmente, en época de exámenes. ¡No te lo pierdas!
Iluminación natural
Contar con una buena iluminación en la zona de estudio no solo es necesario para mejorar la concentración (con una luz poco adecuada al cerebro le puede costar más retener o concentrarse, ya que está más pendiente de esforzarse en ver), sino para no dañar la vista, provocando miopía o vista cansada, algo que podría ocurrir si se pasan largas horas fijando la mirada con una luz poco adecuada. Así, una de las primera cosas que hay que tener en cuenta es que la zona de estudio es mejor que esté situada en un lugar donde se aproveche al máximo la luz natural, que además de ser la más sana, es ideal para ahorrarse algunos euros en las facturas energéticas y para contribuir con el mantenimiento del medioambiente. Eso sí, es importante que no llegue el sol directo.
Además, es recomendable que la estancia no cuente con cortinas demasiado tupidas para que haya claridad aún manteniéndolas cerradas.
Tipos de bombillas
En cuanto a la iluminación artificial, la estancia deberá contar con luz general y puntual. En cuanto a esta última, podrás escoger entre tres tipos de bombillas: las blancas, las azules y las amarillas. La única que no se recomienda para estudiar es la amarilla, ya que provoca más cansancio a la vista. Por el contrario, son muy recomendables las más claras, que también son llamadas frías, ya que se parecen más a la luz natural y no cansan tanto los ojos. Además, teniendo en cuenta que se pasan largas horas estudiando, lo mejor es que la bombilla sea de bajo consumo y que no se caliente en exceso.
No recomendamos en absoluto la luz que proviene de los fluorescentes ni de los LED, ya que, aunque no lo parezca, tienen una especie de oscilación que ocasiona fatiga a la vista,
Tipos de lámparas
En cuanto al tipo de lámpara, lo primero que deberás tener en cuenta es que para las luces frías deberás escogerlas de mayor potencia. Una vez tengas esto en cuenta, lo mejor es que te decantes por un flexo adecuado, que concentre la luz sobre el lugar de estudio, que tenga buena movilidad y al que se puede acceder de forma sencilla, sin tener que levantarse de la silla, lo que podría provocar una pérdida de la concentración.
Por otro lado, debes tener en cuenta que, para evitar sombras, la luz deberá estar orientada dependiendo de si eres diestro (deberá venir del lado izquierdo) o zurdo (deberá venir del lado derecho).
¿Ya tienes claro cómo iluminar la zona de estudio? ¡Pues desde Decorablog te deseamos mucha suerte en los exámenes!
la mejor luz para estudiar de noche es la blanca