Las tejas solares son una de las mejores opciones que hay en el mercado para obtener energía solar y, al mismo tiempo, no perjudicar la estética del tejado. Son muy parecidas a las tejas de toda la vida en su forma y su color, con la única pero gran diferencia de que además de cubrir el techo de la casa pueden producir electricidad, la cual se puede aprovechar para generar calor. Estas tejas llevan una placa solar en el medio que se encarga de captar las radiaciones emitidas por el sol y las almacena para poder generar la energía deseada o necesaria.
Son muchos los modelos de tejas solares que actualmente se pueden instalar en cualquier tejado, siendo una de las principales ciudades del mundo en utilizarlas Venecia. Al no estar todavía muy estabilizadas en el mercado son más caras que los paneles solares y también es mucho más complicado conseguir a una empresa o un profesional que sepa instalarlas ya que todavía no están muy desarrolladas ni tecnológica ni comercialmente.
Los paneles solares son los sistemas térmicos que se utilizan con mayor asiduidad en los edificios para poder aprovechar la energía que irradia el sol, pero tienen el gran inconveniente de que su impacto visual y su apariencia en la parte más alta de las viviendas es uno de los motivos por el que muchos propietarios no se han decidido todavía por pasarse a la energía solar ya que rompen la estética del edificio y eso hace que muchas personas no aprecien sus beneficios tanto como para poner “feo” tu tejado.
Las tejas solares se comenzaron a fabricar para luchar contra esa mala estética, y gracias al desarrollo de nuevos sistemas y materiales, pronto se podrán ver tejados solares completos sin que pueda apreciarse la diferencia a simple vista con un tejado normal. No sólo será estéticamente bonito sino que además quien lo tenga podrá aprovecharse de todos los beneficios que generan estos materiales.