Conversión de las que impresionan, de iglesia a casa como el que no quiere la cosa. Eso es precisamente lo que ha sucedido con una iglesia de 1850 que ha pasado a ser una moderna casa en la que se puede vivir con todo tipo de lujos. Está situada en Parkside, Australia, y tengo que reconocer que he ma dejado con la boca abierta.
Fijándonos en la fachada podemos darnos cuenta de que sí fue una iglesia, pues han mantenido la piedra en las paredes y también algunos elementos propios de este tipo de edificaciones promulgadas por el cristianismo. Sin embargo, si nos adentramos en ella nos damos cuenta de que poco o nada tiene que ver con lo que algunos se encuentran cada domingo cuando van a misa.
Cuenta con tres amplias habitaciones, una cocina muy bien equipada, una sala de estar abierta y un techo que en algunos puntos llega a alcanzar los 5 metros de altura. El suelo es de baldosa y lo mejor de todo es que cuenta con una sala para el entretenimiento que va a dar a una terraza fantástica en la que poder tomar algo en verano con la familia o los amigos. El edificio es antiguo, pero la decoración es muy moderna.