El rojo es un color que simboliza fuerza y energía. Puedes emplearlo en tu decoración a modo de detalle para que no sature demasiado los espacios, aunque bien equilibrado también puede figurar en dosis más grandes.
Pero hoy vamos a fijarnos en esos detalles significativos que hacen posible una decoración muy especial para tu hogar. Con estas ideas conseguirás diseñar unos ambientes chulísimos introduciendo esta tonalidad en sutiles pinceladas. ¿Te animas a jugar con el rojo para la decoración de tu casa?
Un mueble rojo
Una de las ideas que me gustan mucho para que el rojo forme parte de tu decoración consiste en utilizar un solo mueble rojo. Sí, solamente uno. El ejemplo que vemos en esta fotografía es muy ilustrativo.
Como ves, sobre una decoración en blanco y madera, con algunos toques verdes y amarillos, se ha añadido un taburete rojo. El resultado salta a la vista. Este mueble llama la atención y le aporta un toque muy colorido y alegre a la estancia.
No tiene que ser excesivamente pequeño, puedes hacer esto mismo con el sillón del salón o incluso un sofá, si te apetece, también con alguna cómoda, una mesita auxiliar…
Un sutil detalle
Este mueble era bastante pequeño pero ahora te propongo incluso algo más sutil como, por ejemplo, el cable de una lámpara de bombilla colgante. Lo puedes ver en la foto principal, aunque en este caso se ha acompañado de otros elementos igualmente pequeños en color rojo. Quedan genial en la composición final, ¿no te parece?
Sillas rojas
Para que tu decoración adquiera un aspecto muy alegre y con mucha fuerza puedes colocar las sillas de la cocina o del salón en color rojo. O las de la terraza. Este conjunto resulta muy agradecido y, de este modo, conseguirás que todas las miradas vayan hacia aquí, pudiendo crear un rincón especial y perfectamente decorado para cada ocasión.
Y si optas por algún modelo de diseño incluso será mucho más efectivo. Puedes dejar solamente las sillas en rojo o combinarlo con algún otro elemento más también en este color.
Toques de rojo en la cocina
La cocina es una estancia que admite muy bien el color rojo. Puedes utilizarlo en muebles y paredes pero si te apetece hacerlo solamente con algún detalle elige esta tonalidad para los textiles, por ejemplo, para algún tarro o las sillas que te comentaba anteriormente.
Rojo en el cuarto de baño
En el baño el color rojo aportará dinamismo y elegancia. Emplea este color para, por ejemplo, la alfombra de ducha o las toallas. Si el resto de la estancia está decorada en blanco como protagonista vas a lograr un contraste muy bonito y alegre.
Y también sobre fondo negro como vemos en la imagen de la izquierda. El rojo aporta luminosidad en este caso y suaviza en cierta medida la sobriedad del negro, sin restar por ello elegancia. Y si te animas, incluso puedes utilizarlo para la encimera como vemos en el ejemplo de la derecha.
Una pared roja
Estamos descubriendo ideas para introducir pequeños detalles decorativos en rojo. Ahora quiero contarte una que también hace uso del rojo aunque quizá en una proporción algo más amplia. Me estoy refiriendo a pintar una de las paredes de la cocina o del salón en color rojo. Deja el resto en blanco para que visualmente el espacio no quede excesivamente saturado y así lograrás un equilibrio en el ambiente.
Esta pared en rojo aportará mucha y fuerza. No te recomiendo este color en el dormitorio, ya que generalmente es una tonalidad bastante energética que no se aconseja para lugares en los que queremos fomentar la calma y el descanso.