La decoración del salón ofrece múltiples posibilidades. Por ello, es recomendable potenciar la perspectiva creativa durante el proceso de preparación de un espacio que enmarca tantos momentos felices. ¿Cómo dotar al entorno de una estética original? En Decorablog proponemos una selección de ideas sencillas.
1. Zona de estar (y otros espacios complementarios)
Aunque la zona de estar suele ser la más importante, existen otros espacios complementarios que pueden integrarse en el plano: el comedor, un pequeño despacho, un recibidor, una zona de juegos, un mirador, un rincón de lectura… Por tanto, haz un análisis de las necesidades que se enmarcan en la superficie disponible y decide qué ambientes van a completar la estancia.
2. Rincón de recuerdos personales
El salón aporta una perspectiva muy especial no solo a quienes residen en el hogar: dicho escenario también da la bienvenida a la visita de familiares o amigos. Por este motivo, es el universo perfecto para compartir recuerdos personales en un marco decorativo que muestra una selección de detalles que tienen un valor emocional: fotografías, cuadros, adornos, pequeñas esculturas… En definitiva, diseñar un rincón artístico con cuadros personalizados puede ser una gran opción, y es algo más sencillo de lo que piensas gracias a páginas web en las que podrás encargar cuadros personalizados donde imprimen la imagen que quieres sobre cartón-pluma, lienzo, madera…
3. Salón de estilo ecléctico
La creatividad en la decoración del salón se potencia por medio de la mezcla de distintos estilos decorativos. Habitualmente, la composición muestra la combinación de dos o tres propuestas complementarias. Pues bien, la búsqueda de la originalidad puede ir un paso más allá para seleccionar un enfoque que potencia la personalidad de un espacio interior: un salón que luce una imagen ecléctica refleja diferentes texturas, formas y matices.
4. Cuida la decoración que destaca detrás del sofá
La originalidad en la decoración del salón pone el acento en una perspectiva concreta, por ejemplo, aquella que remite al espacio que se sitúa detrás del sofá (uno de los muebles más relevantes del lugar). Con frecuencia, los asientos se alinean con una de las paredes principales para ganar espacio en el centro de la zona de estar. Pues bien, es posible vestir la pared con una composición asimétrica formada por varios cuadros.
¿Quieres incrementar la profundidad en el límite que se integra detrás del sofá? En ese caso, opta por un espejo con un formato llamativo con un diseño irregular. Sin embargo, el sofá también puede ubicarse en otras posiciones cuando se sitúa en una estancia grande. Es un mueble que puede formar una unidad a nivel visual con otras piezas como una estantería baja o una mesa antigua (que se coloca detrás del producto mencionado).
5. Mezcla muebles de líneas rectas y otras piezas en contraste
Los matices en la decoración del salón van más allá de la perspectiva cromática. Es posible poner el acento en la forma de los muebles y complementos. De este modo, las piezas de líneas rectas se fusionan perfectamente con otros elementos que presentan un formato más redondeado.
6. Añade un mueble con historia
La originalidad en la decoración del salón muestra las múltiples perspectivas que destacan en el entorno. Por ejemplo, la presencia y el acabado de un mueble auxiliar antiguo transforman el plano con un punto focal que tiene un valor emocional.
7. Decora con flores blancas el salón de tu hogar
La decoración floral se integra con especial acierto en el salón. Forma un binomio muy elegante con el contexto en el que se enmarca. Es habitual hacer cambios estacionales que actualizan el look del lugar. Pues bien, vestir la estancia con composiciones de flores blancas es una apuesta segura.
Sencillamente, el tono combina con todos los estilos que puedes visualizar en tu hogar. Es una ornamentación que dirige la mirada hacia muebles concretos de la habitación como la mesa de centro o el aparador.