La decoración es una temática que puede centrar tu atención en el Día de San Valentín al vincular el lenguaje del amor al cuidado de los detalles desde el punto de vista visual. Los sentimientos no se observan de forma visible como cualquier producto material, sin embargo, se sienten. La verdad del corazón no solo puede expresarse a través de las palabras o el lenguaje no verbal, también se manifiesta por medio de la comunicación visual del interiorismo. ¿Cómo incrementar la creatividad con motivo del Día de los Enamorados?
Tarjeta de felicitación
Por medio de los productos de papelería puedes personalizar la celebración de este día al escribir un mensaje dedicado a esa persona especial para ti. Muchas parejas todavía prefieren imprimir sus fotografías, aunque puedan tenerlas en soporte digital, porque la impresión aporta una entidad más cercana a esa secuencia de imágenes.
Si a ti también te gusta más esta idea, también puedes trasladar este ejemplo a la elección de tu tarjeta de San Valentín. Puedes encontrar en tiendas especializadas estos productos, pero también puedes incrementar tu creatividad para diseñar tu propio modelo de felicitación. Este ejemplo de regalo sencillo es emotivo por su valor emocional tanto para quien expresa aquello que siente como para quien recibe esas palabras tan bonitas.
Decoración con fotografías
El lenguaje visual está muy presente en el día de San Valentín como puedes observar a través de la metáfora de las flores que convierten en arte los escaparates de las floristerías o el marketing en torno a la temática del amor que emprenden los centros comerciales.
Esta información visual también llega al hogar a través de la evocación de imágenes de flores y paisajes. Porque las flores no solo pueden presentarse en el tradicional ramo, sino también por medio de instantáneas que forman un conjunto con significado. Imágenes que describen una historia desde la sencillez de una estantería. Esta idea puede personalizarse a partir del gusto personal para seleccionar fotografías con un sentido propio. Elige imágenes que te transmiten belleza, paz interior, alegría y plenitud.
Terraza decorada
Si tienes una terraza cubierta y disfrutas de esta zona como una prolongación del salón, tal vez puedes dar a esta zona un espacio protagonista en la decoración de San Valentín. No importa que el lugar sea pequeño, lo importante es potenciar la utilización de los elementos disponibles y la propia intención de sorprender a la pareja con una imagen que rompe con la rutina habitual.
Flores rojas
Las flores están presentes en los momentos más importantes de la vida de las personas. Forman un elemento más de la temática de días diferentes como los cumpleaños, las bodas, y también, los funerales. En el Día de los Enamorados el lenguaje de las flores resulta universal para expresar sentimientos. Este gesto puede llegar a convertirse en una tradición que se repite año tras año en el contexto de una historia de amor. En ese caso, elige un ramo que te encante y déjate asesorar por quien trabaja en la floristería.
El rojo es uno de los colores más representativos de esta fecha, la tonalidad por excelencia del 14 de febrero. Por ello, puedes dar un toque en rojo a la decoración de tu hogar por medio de la ornamentación romántica.
Decoración con corazones
Así como el color rojo es el tono más representativo de San Valentín, una imagen que también representa la metáfora visual del Día de los Enamorados es el corazón como símbolo universal. Por tanto, puedes inspirarte en esta figura para decorar tu hogar de forma sencilla con una lluvia de corazones en distintos colores y tamaños.