A los amantes de la decoración nos encanta decorar cualquier estancia del hogar, pero si hay una habitación con la que disfrutamos de verdad es con el dormitorio de los más pequeños de la casa, ya que este espacio nos permite dejar volar la imaginación. Eso sí, hay algunos consejos de seguridad que hay que tener en cuenta para evitar accidentes que pongan en peligro a los niños.
Una de las cosas que deberás decidir a la hora de decorar las habitaciones infantiles son los colores que van a primar en la estancia. Tienes muchas alternativas pero, sin duda, una opción segura es apostar por el blanco, un color unisex y versátil con el que podrás conseguir dormitorios luminosos, amplios y tremendamente atractivos. Para demostrártelo, hoy vamos a mostrarte un montón de imagines de habitaciones infantiles en blanco. Además, vamos a aprovechar la ocasión para darte algunas ideas y consejos interesantes. ¿Te gustaría acompañaros?
Ventajas de decorar la habitación infantil en blanco
Una de las grandes ventajas del blanco es que es un color unisex, por lo que puede quedar igual de bien en habitaciones de niños como de niñas. Pero no creas que eso es lo más importante. Y es que el blanco es un color versátil que encaja perfectamente en dormitorios de todos los estilos. Eso sí, es ideal para estancias de estilo nórdico, un tipo de decoración que está muy de moda en estos momentos. Además, se trata de un color que, bien utilizado, puede transmitir paz y armonía. Por si esto fuera poco, el blanco es capaz de ampliar los espacios visualmente y de dar más luminosidad a las estancias. Por tanto, es ideal para habitaciones infantiles con pocos metros cuadrados.
Presente en todo tipo de elementos
Otra de las grandes ventajas del blanco es que puede estar presente en cualquier elemento de la estancia. Lo más normal es emplearlo en las paredes, sobre todo en habitaciones pequeñas. Si te decantas por esta opción, también puedes escoger los muebles en blanco, aunque deberás añadir otros colores a través de los textiles, los complementos, los objetos decorativos y los juguetes. Otra opción que puede quedar muy bien es pintar las paredes en otro color que no sea el blanco, preferiblemente claro para no saturar el espacio, y escoger los muebles de color blanco. Lo que no es tan común en dormitorios infantiles es emplear el blanco para los detalles decorativos, aunque no es una idea que debas descartar.
Colores que combinan con el blanco
Aunque podrás optar por una habitación monocolor en blanco, lo ideal es combinar este color con otras tonalidades para que la estancia no quede demasiado fría y aburrida. Lo bueno es que el blanco combina perfectamente con cualquier color de la paleta cromática. Un binomio que puede quedar genial en habitaciones infantiles es el blanco-negro, que en estos momentos está muy de moda. Se trata de una opción ideal para ambientes de estilo nórdico. También son muy adecuados los tonos pastel, sobre todo si quieres lograr un dormitorio de estilo romántico. Eso sí, si prefieres una habitación más alegre, lo más recomendable es que optes por colores más vibrantes. Por otra parte, debes saber que cualquier tonalidad neutra (beige, gris, marrón…) encajará perfectamente con el blanco.
A continuación te dejamos con nuestra galería donde, como te hemos comentado al principio, vamos a mostrarte un montón de imágenes de habitaciones infantiles decoradas en blanco. ¡Seguro que te sirven de inspiración a la hora de decorar el dormitorio de los más pequeños de la casa!
