A unos 25 kilómetros de Lisboa se sitúa Cascais, una bonita villa portuguesa de unos 33.000 habitantes en la que hay espacio para construir casas tan increíbles como la que nos ocupa en este artículo.
Los encargados de diseñarla y construirla han sido los arquitectos de FRA G MENT OS, una compañía cuya sede está en la capital de Portugal.
Una reforma impecable
Estamos hablando de 6.200 metros cuadrados, de los cuales 1.066 son construidos. Eso significa que es una vivienda que está al alcance de muy pocos mortales, algo que se confirma conociendo las habitaciones que tiene, los materiales empleados para su fabricación o la enorme piscina que centra toda la atención.
Hay que decir que estamos ante una reforma que ha transformado una antigua casa por completo. Han conectado los espacios interiores y han apostado por una armonía arquitectónica que se aprecia desde cualquier ángulo. Lo mejor de todo, en mi opinión, son sus enormes ventanales. Permiten que penetre la luz natural con facilidad y ofrecen unas fantásticas vistas del jardín y la piscina.
En la intersección que hay justo entre las dos secciones perpendiculares de la casa (sala de estar y dormitorios), anteriormente había una oficina/biblioteca de dos plantas que fue suprimida por los arquitectos. Además, también modificaron la gran mayoría de las ventanas que dan a las fachadas meridional y occidental e hicieron todo lo posible por crear pozos de luz para los baños, el jardín de invierno y el salón principal.
Zonas privadas y zonas comunes bien delimitadas
Incrementaron la zona destinada a las habitaciones y separaron con más claridad las zonas privadas de las habitaciones para invitados. Las zonas comunes gozan de un gran espacio abierto para crear nuevas conexiones visuales y fortalecer los vínculos entre el interior y el exterior.
El principal atractivo de la vivienda, la piscina, tiene las mismas proporciones que las salas de estar. En función de la habitación que rodea a la piscina encontramos más o menos privacidad en los espacios al aire libre destinados al ocio.
Fotos de la casa
Créditos de las fotos: Francisco Nogueira