El óxido puede incrustarse en los toldos con mucha facilidad, especialmente si está en zonas húmedas donde además llueve con frecuencia. Su limpieza puede llegar a ser una tarea complicada cuando se incrusta en zonas de difícil acceso, como entre los muelles y la lona, así que sigue con atención estos consejos sobre cómo eliminar el óxido de un toldo para que puedas hacerlo con total seguridad y que la lona vuelva a estar en perfectas condiciones y pueda relucir como el primer día:
– Aplica siempre aceites y productos lubricantes sobre los elementos metálicos que se encuentran a la intemperie. Te ayudarán a repeler la humedad y la corrosión que la acción conjunta del oxígeno y el agua provocan.
– Los fabricantes de estructuras metálicas normalmente las tratan de manera que puedan reducir o prevenir la aparición del óxido. Entérate antes de comprarlo, te sale más rentable pagar un poquito más pero saber que será de mejor calidad.
– Los productos para la limpieza del toldo es recomendable que sean anticorrosivos para minimizar el impacto que éstos tendrán sobre ellos.
– Si el óxido ya está en tu toldo, para poder eliminarlo a fondo debes lijarlo y limpiar la superficie con un paño empapado en vinagre. Asegúrate de que esto lo haces en una superficie segura para evitar caídas, sobre todo si lo tienes en una terraza abierta.
– Si no puedes retirar el óxido con una lija puedes hacerlo con un cepillo, ya sea manual o de esos que pueden acoplarse a un taladro.
– Cuando retires el óxido por completo conviene aplicar sobre la superficie metálica un aceite de vaselina de vez en cuando para evitar que vuelva a aparecer.
– Si hay alguna zona en la que no puedas quitar el óxido es una buena opción pintar esa zona directamente con productos anticorrosivos, ya que éstos pueden aplicarse sin necesidad de que lo retires y evitan también que vuelva a aparecer.