Las cestas colgantes son elementos muy útiles para cualquier jardín o terraza. En ellas podemos plantar todo tipo de especies verdes y plantas perennes que nos van a aportar alegría más que nada en invierno, que es cuando más hace falta.
La elección de una u otra cesta la tenemos que hacer en función del tamaño. Preferiblemente tenemos que escoger la más grande que veamos, a poder ser de 40 cms para que pueda dar cabida a más tierra. Lo malo es que pesará mucho y tendremos que fijarla con seguridad al techo o pared. Además, tenemos que asegurarnos un sistema de riego que no haga que tengamos que subir y bajar la cesta constantemente.
Hay dos tipos de cestas colgantes, las de malla abierta y las de plástico sólido:
Malla abierta: Se incluye el hierro forjado normalmente, aunque este es el más difícil de manejar. La tela mecánica es un plástico recubierto que tiene la función de prevenir la corrosión. Los grandes agujeros sirven para plantar. Estas se secaran más rápido que las cestas sólidas, aunque este problema lo podemos solucionar en parte con un recubrimiento impermeable.
Plástico sólido: No se pueden plantar en los laterales, lo que hace que sean menos decorativas. Lo bueno que tienen es que no hay que regarlas con tanta asiduidad, sobre todo si incorporan un depósito de agua en la parte inferior.
Me gusta esta cesta colgante y estoy interesada en comprar.
Por favor si me pueden indicar donde puedo conseguirlos.
Gracias