Para decorar con gusto no hace falta gastarse mucho dinero. Nuestra imaginación puede lograr resultados magníficos con un coste mínimo. Para demostraros que eso es cierto, hoy os queremos hablar de la decoración a base de frutas secas, algo que empieza a estar muy de moda tanto en salones como en otras partes de la casa.
Manzanas, melocotones, pimientos o naranjas pueden servirnos. Siempre tenemos que decantarnos por productos que tengan una cierta consistencia. Cortaremos esa fruta en rodajas finas de ente 6 y 8 milímetros, sin pelarla y sin quitarle el corazón. También podemos optar por la opción de dejar la fruta entera.
Las rodajas serán colocadas en un recipiente con agua que contenga varias cucharadas de sal. Las dejaremos 10 minutos para evitar que pierdan el color al oxidarse. Las sacaremos y dejaremos que se sequen. Lo mejor será dejarlas encima de un papel de cocina absorbente, pues con ello evitaremos un exceso de humedad.
Dejaremos que se sequen durante 3 días. Si hemos optado por diferentes tipos de frutas, deberemos separarlas para que no se pudran. Así ya las tendremos listas para decorar.