Si eres todo un artista con la aguja quizá este artículo también podría formar parte de la sección Hazlo Tú Mismo. Pero en este caso no vamos enseñarte ninguna manualidad, sino que quiero ofrecerte ideas para decorar con esta técnica, con piezas elaboradas por ti o bien, como puede ser en mi caso que no sé dar ni una puntada, con elementos comprados o regalos que te hagan y que estén fabricados de esta forma. El patchwork es sinónimo de color y alegría y, por eso, decorativamente hablando te ofrece un montón de posibilidades. Te cuento algunas de mis favoritas a continuación.
Qué es el patchwork
Esta técnica se basa en combinar diferentes piezas, normalmente de tela, para crear una más grande a través de esos retazos. Un mural único. Aunque también puedes verlo en otro tipo de materiales como baldosas, papel pintado… Esto hace que puedas encontrarte con creaciones verdaderamente bellas, muy coloridas y llenas de estampados maravillosos. ¿Pero cómo poder decorar con patchwork? Vamos con algunas ideas.
En las paredes o puertas
La primera idea que te cuento consiste en decorar las paredes o puertas de tu casa. Esto puedes hacerlo, por ejemplo, a través de papel pintado o azulejos. Deberás pensar el tamaño de cada cuadro, quedan mejor si son todos iguales, y el lugar donde los vas a colocar. Al tratarse de combinaciones con mucho colorido y estampados diferentes quizá sea mejor dejar sólo una pared para ello, o una parte de la misma, pero no todas las paredes de una habitación ya que quedará muy saturado. Mira en una puerta qué toque más bonito.
Los colores
Aunque esta decoración permite bastante libertad, si quieres que estéticamente quede más atractiva y armónico se aconseja emplear tonalidades que combinen entre ellas, o estampados también similares o complementarios.
Colchas y textiles
Quizá donde más se emplea es la ropa de cama o textiles en general, más que nada porque, en su origen, esta técnica se utilizaba principalmente con tela para hacer mantas, sábanas, colchas, fundas, edredones, cortinas… Pero, con el paso del tiempo, se ha ido extendiendo y ya se introduce en papel pintado, azulejos o vinilos adhesivos para poder diseñar tus propias creaciones de una forma fácil y cómoda.
Alfombras
Una alfombra de patchwork es una alfombra que va a acaparar todas las miradas. En un salón puede resultar increíble colocar una bajo la mesa, por ejemplo, para llenar de alegría y optimismo esta estancia, pues esta técnica es colorida y vital por definición. Eso sí, mira que pegue bien con otros textiles como cortinas o fundas de cojines para que no quede la estancia muy cargada o desequilibrada en cuanto a colores.
Para los muebles
Otra manera de introducir el patchwork en la decoración de tu vivienda es a través de los muebles. ¡Cuántas alternativas! Por ejemplo, en el tapizado de sillones o sofás o incluso en cómodas y mesas. Como te digo, si tienes maña y lo quieres hacer tú mismo, maravilloso, verás qué estilo más personal y maravilloso confieres a tu hogar. Si no es así, en el mercado encontrarás piezas que ya incorporan estos estampados en sus terminaciones.
Ideas y más ideas
A continuación te dejo con una galería de fotos con diferentes ideas que te pueden inspirar para crear tu propia decoración con patchwork. Como verás, hay muchísimas posibilidades, personalmente me encanta en cojines y en ropa de cama, pero mira qué bonito queda, también, en muebles o paredes. Como todo, en el equilibrio está el buen gusto, así que mi recomendación es que no satures en exceso las estancias con este estampado y apuestes por un punto focal que destaque en la habitación sobre el resto de muebles o colores más neutros. ¡Brillará con luz propia!