¿Eres de los que disfrutan viajando? ¿De los que toman nota cada vez que emiten un documental sobre una ciudad turística? ¡Entonces este artículo te gustará! No te teletransportarás a otro lugar del planeta mientras lo leas ni podrás nutrirte de consejos para visitar países lejanos, pero por lo menos sabrás de qué forma puedes tener un mapa siempre a mano.
Me centraré en el dormitorio, que es una estancia en la que pasamos mucho tiempo descansando y soñando con todo aquello que queremos hacer, como por ejemplo explorar templos asiáticos, navegar por el Mar Caribe o sobrevolar las principales ciudades de Estados Unidos. Qué buena pinta, ¿no?
La opción más clásica
Dejo a un lado la nostalgia de cualquier verano bien aprovechado y me centro en lo que nos interesa. Si quieres colocar mapas en tu habitación, debes saber que existen varias soluciones para integrarlos. La más básica y popular de todas es la de pegarlo en la pared en forma de póster o directamente en un cuadro. Debes saber que no es necesario comprar un mapamundi en una tienda, ya que tú mismo, con algo de paciencia, puedes crear uno e ir rellenándolo conforme vas visitando ciudades y países.
He de reconocer que tengo un mapa mural que me permite rascar todos los lugares en los que he estado. Lo puedes enganchar en una pared o lo puedes guardar bien recogido en el tubo que forma parte del packaging del producto. Cada vez que vuelvo de mis vacaciones saco una moneda (si es que me queda alguna) y lo rasco con ganas hasta que se ve el nombre que estaba oculto. Es importante asegurarse de la ubicación del sitio que hemos visitado para no cometer errores. No recuerdo dónde lo compré, pero he visto que está a la venta en Amazon desde 12,90 euros. Es el que puedes ver sobre este párrafo y se llama Scratch Map Travel Edition.
Vinilos
Si consideras que un mapa en formato póster es pequeño, siempre puedes recurrir a los vinilos, que además se integran mejor en las paredes. En la imagen que puedes ver debajo de estas líneas hay dos buenos ejemplos que he encontrado en MyVinilo. El de la izquierda se llama World Trip y está disponible en dos tamaños. Si es de 90 x 50 centímetros cuesta 36,90 euros, y si es de 175 x 97 centímetros cuesta 52,90 euros. Al lado de esta última dimensión ves un mapa de España que se llama Spain, mide 120 x 100 centímetros y cuesta 62,90 euros.
Ropa de cama
Me despego de las paredes para hablarte de algo tan importante en un dormitorio como la ropa de cama. La que puedes ver es una funda nórdica perfecta para no pasar frío. El mapa que aparece dibujado es más propio de la primavera y el verano por sus colores, así que creo que han diseñado este producto pensando en países que nada tienen que ver con los del sur del Mediterráneo. En cualquier caso, queda francamente bien. Está a la venta en Dot & Bo y 109,99 euros, unos 97 euros al tipo de cambio actual. Lo malo es que si visitas su página web te obligarán a registrarte para ver y comprar esta funda nórdica, que por cierto se llama Savvy.
Piezas de mobiliario
Termino este recorrido hablando de un fantástico baúl puf que está fabricado con cajas de fruta pintadas en blanco (también se vende con las cajas sin pintar) y tiene en su parte más blanda, la superior, el mapa del mundo tapizado. Es perfecto para mantener el orden en el dormitorio, y también lo puedes utilizar para descansar. Es una buena idea que lleve cuatro ruedas para facilitar su movilidad. Se fabrica en España, es de tela 100% algodón y mide 50 x 35 x 32 centímetros. Cuesta 89 euros y te lo envían gratis en un plazo no superior a 4 o 5 días. Lo encontrarás en Really Nice Things (reallynicethings.es).
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