Las estadísticas indican que no siempre una vivienda tiene garantizada su seguridad. Se dice que más de la mitad de los accidentes en el hogar le ocurre a las personas mayores de 60 años y estos se deben a caídas, pero entre estos también figuran los incendios, las intoxicaciones y la electrocución. Es un panorama sin duda algo alarmante para quien quiere construir un hogar seguro y libre de inconvenientes. En Decorablog te vamos a dar unas pautas en las que debes fijarte para que tengas una vivienda segura.
Comenzaremos por el sistema de ventilación. Todos los combustibles necesitan aire para quemarse, de modo que este aspecto es fundamental en un hogar. Observa detenidamente los puntos de ventilación de tu hogar. Recuerda que la caldera de calefacción o el calentador ha de poseer un circuito cerrado de ventilación en el que puedan tomar aire del exterior y expulsar los gases. Si ves que aparecen manchas en la parte superior de una caldera, llama a un técnico para que la revise porque eso es un indicio de que el tubo de humos es defectuoso.
La electricidad
Otra causa muy frecuente de un incendio en una vivienda es por sobrecarga, calentamiento o instalaciones eléctricas muy antiguas. Cada cinco años deberías revisar las instalaciones. Asimismo, si adquieres una vivienda de más de 20 años de antigüedad, lo más aconsejable sería renovar las instalaciones eléctricas. En las casas antiguas es frecuente que aún haya instalaciones con fusibles y conmutadores poco fiables.
Los incendios
Por otro lado, los incendios son el más temido de los accidentes domésticos. Para evitarlos has de mantener en buen estado los electrodomésticos y desenchúfalos cuando no haya nadie en casa.
¿Sabías que la propagación del fuego a veces depende de la distribución de la vivienda? Así que si quieres reformar la vivienda y redistribuir sus estancias, lo mejor será que consultes primero a un experto para evitar males mayores en caso de incendio. También sería conveniente que tuvieras un extintor de dióxido de carbono en casa, muy eficaz para combatir incendios producidos en aparatos eléctricos.