Elegir un buen sofá no es tarea fácil. No lo es porque la elección depende de muchos factores que no solo tienen que ver con la calidad del mismo, sino que también hay que prestar atención a las necesidades de las personas que lo van a utilizar para no arrepentirse después de la compra.
A continuación te vamos a dar una serie de consejos con los que te será más sencillo dar con el mejor sofá para tu casa, así que toma nota antes de echar un vistazo a las distintas propuestas que encontrarás en el mercado.
¿Cuántas personas lo vais a utilizar?
Es la primera pregunta que hay que responder. En función del número de personas que lo vayan a utilizar será necesario optar por un sofá más o menos grande. Evidentemente, siempre es mejor que sobre alguna plaza, ya que a la hora de recibir invitados no nos vemos en la obligación de sentarnos en sillas.
En la elección del tamaño hay otro factor que no podemos pasar por alto. Es el del espacio disponible para colocar el sofá. Es imprescindible medirlo para empezar a buscar sabiendo los metros que puede hacer de largo y profundo.
Comodidad ante todo
Es verdad que solo vamos a comprarnos un sofá que nos entre por la vista, pero eso no es lo único que hay que considerar antes de dar el «sí quiero». De hecho, lo más importante es que sea cómodo, que nos permita descansar y disfrutar de nuestra serie favorita en esas tardes de otoño e invierno en las que uno no quiere salir de casa.
Para asegurarse de que es cómodo, no hay nada como probarlo todas las veces que sea necesario. Sin embargo, también hay una serie de características deseables que te permiten hacerte una idea sin salir de casa. Por ejemplo, el relleno de de los asientos, que debe ser de una densidad de como mínimo 30 kilos. En el caso del respaldo esa densidad mínima es de 20 kilos.
La tapicería
Hablar de la tapicería es hablar de palabras mayores. El material elegido es determinante, ya que hay unos que ofrecen resistencia, flexibilidad y elegancia, como es el caso de la piel natural, mientras que otras propuestas más económicas también pueden darte muy buenos resultados, sobre todo si cuentan con tratamientos anti manchas.
El diseño
Antes hemos comentado que lo más importante es la comodidad, pero como es lógico también hay que prestar atención al diseño, que debe ser de nuestro agrado. Y no solo eso, sino que hay que fijarse en el estilo decorativo reinante en nuestro salón para que el sofá no desentone en absoluto.
Los acabados lisos son los más habituales y los colores que más éxito tienen son los neutros por lo fácil que es combinarlos con el resto de la decoración. Los estampados son más apropiados para salones en los que no hay problemas ni de espacio ni de luz natural, ya que en salones pequeños corremos el riesgo de recargar demasiado el ambiente a nivel visual.
Sofás que marcan la diferencia
Si estás buscando sofás exclusivos, te recomendamos fijarte en los que están a la venta en Vivarea. Algunos de ellos puedes verlos en este artículo, ya que nos han servido para ilustrarlo. Están elaborados con materiales de calidad y tienen un diseño precioso. Además, ofrecen todo tipo de soluciones, como la de almacenamiento o la que permite mover tanto los cabezales como los asientos para convertir el salón en el lugar más relajante de tu casa.