Estos días os he estado contando que he hecho obras en casa para modernizarla un poquito que falta le hacía. Una de las principales cosas que tuve que hacer fue desempapelar las paredes, una tarea tediosa y agotadora pero que sin duda merece la pena cuando luego las ves bien arregladitas.
El tiempo que tardes en hacerlo dependerá no solo del tamaño de la estancia sino también de cómo esté fijado el papel ya que hay lugares en los que puede ser muy fácil de quitar pero en otros realmente te cuesta muchísimo trabajo, especialmente en paredes que dan a la calle ya que tienen más humedad y el papel se pega mucho más. Toma nota de estos consejos para desempapelar las paredes:
– Lo primero que tienes que hacer es vaciar toda la habitación para que el trabajo sea mucho más fácil y no tengas que estar moviendo muebles, aunque si no tienes espacio en otro sitio para ponerlos lo mejor es que los juntes en el medio de la habitación para así dejar libre la zona de las paredes y poder moverte mejor.
– En las ferreterías y tiendas de bricolaje o pintura encontrarás un líquido especial para quitar el papel, que no es que te caiga de una pieza pero sí que lo humedece muchísimo y sale con mayor facilidad. Mezcla un par de chorros en un cubo de agua y con el cepillo de la escoba o con una brocha ve poniéndolo sobre la pared, como si la estuvieras pintando.
– Cuando hayas puesto el líquido déjalo 10 minutos para que pueda actuar y comienza a quitar el papel con una espátula o con una cuchilla (yo probé con la que hay para vitrocerámicas y me fue mucho mejor que con una espátula normal). Ve quitando todo el papel hasta que ya no quede nada en ningún rincón para que después se pueda alisar bien la pared.
– Si tienes varias capas de papel ve quitando de una en una a no ser que te vayan saliendo varias a la vez, y es que dependiendo del grosor del papel te saldrá mayor o menor cantidad. Si no te salen las demás capas no te preocupes, quita toda la primera y luego vuelve a poner el líquido para poner las demás.