¿Vives estresado? ¿El día a día te consume y estás nervioso por culpa del trabajo y una serie de problemas de los que no es fácil olvidarse? No te preocupes, en esta vida todo tiene solución, o como mínimo podemos cambiar nuestra forma de ver el mundo para no sufrir tanto. Con ese objetivo es buena idea crear una zona chill out en casa, un rincón en el que los niveles de estrés se desploman y tu optimismo se dispara.
A continuación voy a darte algunos consejos que te ayudarán a tener tu propio espacio de calma y relajación, un lugar perfecto para desconectar aunque solo sea durante unos minutos. ¿Te apetece conocerlos?
Muebles bajos
Esta primera recomendación tiene que ver con el mobiliario, que debería ser más bien bajo. Me refiero a los sofás, a las mesas o a las butacas que vayas a seleccionar para crear tu rincón chill out, donde también tienen cabida otras piezas que velan por tu confort como los pufs. Es por ello que una buena opción es comprar (o hacerlos tú mismo) modelos fabricados con palets.
El recurso de la silla colgante y las hamacas
Si tienes un patio, un jardín o una terraza no deberías dejar pasar la oportunidad de instalar una silla colgante o una hamaca. Son muy cómodas y te permiten disfrutar del buen tiempo, aunque también las hay que están pensadas para ir colocadas en interiores.
Artículo recomendado: DIY hamaca de tela para tu rincón de relax.
Música relajante
En todo rincón chill out que se precie no puede faltar una ración de música relajante. En ese sentido no es fácil dar recomendaciones porque cada uno tiene sus gustos, pero a mí personalmente me relaja mucho escuchar canciones del género musical brasileño llamado Bossa Nova.
Aromas que ayudan a desconectar
De la misma forma que podemos relajarnos gracias a lo que escuchamos, también podemos bajar nuestras pulsaciones gracias a un aroma que nos transporte a un lugar alejado de la ciudad, como por ejemplo un aroma a brisa marina con el que es fácil sentirse como si uno estuviera de vacaciones.
Cojines y más cojines
Para relajarse hay que estar cómodo, y para ello no hay nada como recurrir a unos cojines que sean lo suficientemente blandos como para que la espalda lo agradezca. Y si encima son achuchables, mejor que mejor, ya que al abrazarlos liberarás estrés.
¿Un rincón de lectura?
Tu zona chill out puede ser también tu zona de lectura. Todos hemos soñado alguna vez con tener un rincón de lectura situado al lado de una ventana con unas vistas increíbles, aunque por desgracia pocas veces se da esa situación. La parte positiva es que para crear ese pequeño espacio de relajación y cultura solo tienes que tener una butaca, una mesa auxiliar y una lámpara que te ilumine cuando la luz escasee. Eso y un reposapiés, que nunca viene mal.
La luz también cuenta
Ya ves que todos los sentidos entran en juego. El de la vista tampoco se queda fuera, así que cuida detalles como la luz ambiental artificial, que puede ayudarte a crear una atmósfera mágica. Además, no dudes en utilizar velas y la clásica guirnalda de bombillas que tantas veces hemos visto en terrazas. La luz que desprenden no puede ser más acogedora.
Un refugio para picotear
Por último, me gustaría comentar que una zona chill out también puede ser aquella que nos brinda la posibilidad de picotear en la más estricta intimidad. Disfrutar de los alimentos en un ambiente relajado es otro placer que merece la pena experimentar, así que no dudes en sacar partido a las zonas exteriores para hacer el vermú en los meses más calurosos del año. Seguro que más de uno se apunta a tu plan.
Artículo recomendado: 3 estilos para crear una zona de relax en casa.