Cuando escogemos los colores que van a formar parte de la decoración de cualquier estancia solemos olvidarnos del negro. Y la mayoría de los que lo tienen en cuenta, solo lo utilizan en pequeñas dosis. Sin embargo, debes saber que, aunque se trate de una opción arriesgada, emplear este color en decoración puede proporcionar excelentes resultados. Eso sí, hay que usarlo con mucho cuidado.
Versátil y atemporal, el negro puede transmitir elegancia, sofisticación y sobriedad. Como sabemos que emplearlo en la decoración del hogar es complicado, hoy queremos darte algunos consejos e ideas interesantes. ¿Te gustaría acompañarnos?
Ventajas e inconvenientes de decorar en negro
Lo primero que queremos comentar es que utilizar el negro en la decoración del hogar tiene sus ventajas e inconvenientes. Así, es importante que tengas en cuenta que se trata de un color atemporal, lo que quiere decir que nunca pasa de moda. Además, es perfecto para cualquier época del año. Otra ventaja del negro es que es súper versátil y, de hecho, combina perfectamente con todo tipo de colores. Por supuesto, también encaja en todo tipo de estilos decorativos y en cualquier estancia de la vivienda.
Sin embargo, es importante que tengas en consideración que el negro puede ofrecer una sensación de oscuridad, por lo que es mejor no utilizarlo en estancias con poca luz natural. Tampoco es recomendable emplear este color en habitaciones pequeñas, ya que puede reducir el espacio visualmente. Además, el negro puede ser demasiado frío y lúgubre. Por eso, hay que emplearlo con cuidado.
En qué estancias emplear el negro
Aunque el negro en pequeñas pinceladas puede ser utilizado en todo tipo de estancias, si quieres darle un mayor protagonismo, lo mejor es que sea en estancias con mucha luz natural. Y es que, como te acabamos de comentar, una de las desventajas de este color es que roba la luz. Por otro lado, también es recomendable que se trate de lugares con muchos metros cuadrados para que no se vean más pequeños de lo que en realidad son.
Si reúne estas características, cualquier estancia de la casa es buena para utilizar el negro en la decoración: salones, comedores, baños, cocinas, dormitorios…
El negro en estancias pequeñas o poco luminosas
Si decides emplear el negro en una estancia pequeña o poco luminosa, será mejor que lo hagas en pequeñas dosis. ¿Qué queremos decir con esto? Pues que deberás utilizarlo en textiles, complementos y objetos decorativos. Si las paredes de la estancia en cuestión son blancas o de un tono similar, entonces también podrás escoger piezas de mobiliario negras, especialmente si se trata de muebles auxiliares, que suelen ser más pequeños.
El negro en paredes
No es algo habitual, pero el negro también puede utilizarse en paredes. Por supuesto, como te hemos comentado antes, si te decantas por esta opción, es imprescindible que sea en estancias grandes y con mucha luz natural. Además, te recomendamos no abusar demasiado de este color.
Lo más recomendable es no pintar todas las paredes de negro, sino únicamente una o dos. Por ejemplo, en el dormitorio puedes pintar la pared del cabecero. Algunos expertos recomiendan pintar de negro la pared que esté perpendicular a la luz natural para aportar sensación de amplitud.
Independientemente de que pintes una o más paredes de negro, lo ideal es que combines este color con un tono opuesto que lo matice y que aporte luminosidad a la estancia. Por supuesto, el blanco es una excelente opción.
Otra opción para tener una pared negra es empapelarla con un papel pintado en el que este color sea el protagonista. Piensa que este tipo de complementos aportan un gran impacto visual. Además, debes saber que los motivos sobre negro ganan profundidad.
Decorar en blanco y negro
Aunque podrás combinar el blanco con multitud de colores, debes saber que optar por el blanco es una excelente opción. De hecho, el binomio blanco-negro siempre ha sido un clásico en el mundo de la decoración. Además, últimamente está más de moda que nunca. Lo bueno de combinar el negro con el blanco es que éste último color contrarresta su fuerza y potencia la luminosidad. Y ya sabes que el blanco amplía los espacios visualmente.
La combinación del blanco y el negro es ideal para ambientes minimalistas, aunque también es perfecta para estancias decoradas siguiendo el estilo nórdico, que ya sabes que está cada vez más de moda.
Combinar el negro con otros colores
Por supuesto, también podrás combinar el blanco con otro tipo de colores. De hecho, como te hemos comentado antes, encaja perfectamente con cualquier tonalidad: rojo, verde, amarillo, rosa… Eso sí, siempre es recomendable que en la estancia haya elementos en tonos claros para que no resulte demasiado oscura o lúgubre.
Muebles negros
Como te hemos comentado antes, escoger muebles negros es una excelente idea para introducir este color en un espacio en el que predominen los tonos claros. Si acabas cansándote de este color, siempre puedes cambiar los muebles o pintarlos de otro color. Y si se trata de un sillón o un sofá, también puedes tapizarlo con otro color.
Escoger un suelo negro
Por último, queremos comentar que aunque los suelos claros están adquiriendo cada vez un mayor protagonismo, los pavimentos negros también son muy populares en estos momentos. Eso sí, si te decantas por esta opción, es mejor que no abuses de este color en el resto de la estancia. Podrás encontrar suelos negros de cerámica, pizarra, microcemento, maderas oscuras…
Artículo recomendado: Ventajas de pintar las paredes de negro