En Decorablog no nos cansamos de repetirlo… La clave de una decoración exitosa se encuentra en los detalles. Pequeños detalles que marcan la diferencia como por ejemplo las alfombras.
¿Pensando en renovar las alfombras de tu casa? Si tienes dudas, no te pierdas nuestros consejos para escoger la alfombra perfecta para cada estancia de la casa. Decorativas para el salón, resistentes y duraderas para ambientes de exterior, antideslizantes para el cuarto de baño… ¡Toma buena nota!
El material
El primer aspecto, y puede que el más importante, es el material de nuestra alfombra. Porque no es lo mismo decorar un ambiente de exterior que espacios de interior. Las condiciones ambientales y el uso frecuente estropearán más fácilmente las alfombras en algunos rincones de la casa como por ejemplo la terraza, el cuarto de baño y las zonas de paso.
En estos casos, se recomienda escoger alfombras elaboradas con materiales resistentes. Pero si estás pensando en una alfombra para el cuarto de baño, te aconsejo que elijas una especial antideslizante. En algunos espacios de casa conviene dejar a un lado el criterio estético y asegurarnos de que nuestra alfombra cumple con su función.
De fibra natural, acrílicas, de plástico, con materiales ecológicos como el sisal, de lana para que resistan durante mucho más tiempo, y otros muchos materiales más en función del rincón de tu casa y del uso que vas a hacer de tus alfombras.
El tipo de estancia y el diseño
Y llegados a este punto, tenemos que hablar de otro detalle muy importante que es el tipo de estancia. Tal y como te avanzábamos antes, no es lo mismo el salón que el cuarto de baño, la terraza o el dormitorio. Por lo tanto, para cada estancia de la casa, la alfombra ideal.
En este sentido, también debemos considerar el color predominante en nuestra habitación, la decoración y el estilo de la misma. ¿Una estancia vintage, romántica, clásica, barroca, de estilo victoriano, de inspiración británica, francesa, ambientes rústicos…?
Al escoger tu alfombra debes intentar que su diseño guarde relación y armonía con el resto de la decoración. Y asegúrate también de que el color combina con las tonalidades de nuestra habitación. Así que puedes escoger una alfombra con un color principal en tu estancia o bien con uno secundario.
Por ejemplo, si la decoración de tu salón es principalmente en tonos beige, puedes alegrar tu habitación con una alfombra en algún color más llamativo. De esta forma conseguirás un increíble contraste de color que no pasará desapercibido.
El presupuesto y el espacio disponible
Tampoco te olvides de otro detalle muy importante al escoger tu alfombra que es el presupuesto disponible. El diseño, el tamaño, la calidad de los materiales y la marca de nuestra alfombra puede disparar el precio de nuestro artículo decorativo.
En este sentido, también hay que tener en cuenta el espacio disponible en nuestro hogar. Si tu habitación es pequeña y poco luminosa, una alfombra puede recargar todavía más la decoración, especialmente si es un diseño oscuro y llamativo. En estos casos, lo mejor es prescindir de este accesorio. Pero si la habitación es grande y luminosa, puedes permitirte el lujo de decorar con cualquier tipo de alfombra.
El confort es otro detalle que también influye al escoger nuestra alfombra. Los diseños de lana y mullidos son una gran elección para el dormitorio o el salón. Con cada pisada, la sensación debajo de nuestros pies es indescriptible. Y ya se sabe que en el hogar, la comodidad ante todo.
¿Te han resultado de utilidad nuestros consejos? No olvides compartir con nosotros tus propias sugerencias para escoger la alfombra ideal para la cada rincón de la casa.
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