Las chimeneas son una parte muy importante en la decoración del hogar y un elemento básico para muchas familias durante los meses de invierno, y es que si vives en una zona donde hace frío sin duda se convertirá en tu salvadora para que el tiempo que estés en tu hogar estés con el mayor calor posible. Aunque sea un elemento básicamente invernal, está ahí todo el año así que cuando no se utilice hay que sacarle provecho también. Lo mejor es que la integres en la decoración para que forme parte activa de tu hogar siempre.
Dependiendo del estilo de chimenea que tengas puedes decorarla de una u otra manera, ya que su diseño es muy importante para saber qué uso decorativo puedes darle. Si tienes una chimenea tradicional de leña en piedra, seguramente tendrás una balda de madera a una altura media. Esa balda es ideal para que coloques un par de elementos decorativos que sean importantes para tí y que tengan que ver con la estación del año en la que te encuentras.
En las fechas navideñas está claro que la decorarás con figuritas como un Papá Noel, un trineo, un Belén o un pequeño árbol de Navidad. En las fechas veraniegas puedes colocar algún marco de fotos divertido que tenga fotos veraniegas, como en una playa, en la piscina o en la montaña. El resto del año, te quedarán muy bien un par de candelabros o cualquier otro elemento que le dé un toque un tanto chic a esa parte tan importante de la casa.
Si tienes cualquier otra chimenea que no forma parte del hogar sino que es de las eléctricas, durante los meses en los que la utilices no podrás poner nada ya que es probable que la base esté muy caliente y es mejor no arriesgarse, pero el resto del año sí puedes colocar alguna figurita o incluso algún tapete mono para taparla, siempre y cuando ese tapete combine con el resto de la decoración. Lo ideal es que, sea como sea la chimenea, no la recargues con demasiadas cosas, un par de objetos es suficiente.