¿De qué color tienes pintados los techos de casa? Lo más probable es que sea de blanco. El blanco ha sido hasta ahora el color estrella en los hogares. Paredes y techos de blanco protagonizan la mayoría de las estancias de una vivienda. Sin embargo, las tendencias cambian. En los últimos años se ha observado un deseo de darle más colorido a las vivienda. Las paredes ya no se pintan del mismo color del techo y los techos tampoco tienen por qué pintarse blanquecinos.
Cada color aporta una sensación diferente al hogar. Por ejemplo, las tonalidades muy oscuras ofrecen la sensación de que los techos están mucho más bajos. Esto es ideal para casas de campo en la que los techos de la vivienda son excesivamente grandes y se quiere convertir el hogar en un espacio mucho más acogedor.
Colores fríos o cálidos
No olvides la importancia de los contrastes entre el techo y las paredes, si quieres que el techo se vea más cerca, píntalo de un color más oscuro que las paredes. Si esa no es tu intención, entonces el color de las paredes ha de ser más oscuro que el del techo.
¿Qué color elegir para pintar el techo? Todo depende de la sensación que quieras transmitirle a la estancia. Los azules, violetas y grises darán al espacio una sensación mucho más fría y sombría; mientras que colores como el rojo o el naranja dan alegría y aportan calidez a la habitación.
La iluminación es también relevante. Según el color del que pintes el techo, la luz deberá ser o no más amarillenta. Si es techo es, por ejemplo, de un color azul, habrá que darle un tono más cálido a la estancia con una luz más amarillenta. Por otro lado, si las paredes y el techo son de colores cálidos, es conveniente que la iluminación sea más blanquecina.