Con mucha frecuencia, el baño es ese cuarto de la casa que está condicionado por un espacio pequeño o mediano. Sin embargo, en ocasiones la estancia ofrece una amplitud que muestra su mejor versión. Sin embargo, la estética del lugar puede presentar algunas imperfecciones, como sucede con estos cinco errores frecuentes.
1. Una gran sensación de vacío
El espacio libre siempre es necesario en cualquier tipo de habitación. En primer lugar, ofrece la seguridad necesaria en las zonas de paso. Por otra parte, es ideal para reducir los obstáculos en el centro de una superficie. Pero es recomendable que el mobiliario, los complementos y otros detalles decorativos mantengan la armonía con el contexto.
Cuando un baño grande transmite una gran sensación de vacío en su imagen visual, parece que todavía no está completamente terminado. Es una percepción que, por otra parte, influye negativamente en la calidez de la estancia.
2. Una lavadora que llama excesivamente la atención
Un baño grande ofrece muchas ventajas. Entre ellas, presenta la amplitud suficiente para integrar la lavadora en la composición definitiva. Una medida que puede ser especialmente práctica para ganar algunos centímetros en otras estancias. La lavadora es un electrodoméstico práctico y funcional. ¿Pero qué ocurre cuando la ubicación del dispositivo no embellece la decoración integral del baño?
Es uno de los errores que se produce habitualmente en este contexto de la vivienda. Por ejemplo, es recomendable que el reflejo del aparato no se perciba a través del espejo del cuarto. En ese caso, el electrodoméstico duplica visualmente su presencia, es decir, adquiere un mayor protagonismo.
3. Predominio de colores oscuros
La extensión de un baño grande aporta numerosas posibilidades en el diseño. Por ejemplo, los tonos oscuros lucen mejor que en un cuarto mini. En el primer caso, hacen que la superficie parezca todavía más pequeña. Por ello, puedes jugar con una gran variedad de tonalidades para vestir un entorno moderno, acogedor y en tendencia.
Sin embargo, un baño grande transmite una imagen diferente cuando en el look de la estancia no destaca algún tono más claro que marque un atractivo contraste. Especialmente, si el cuarto no dispone de una ventana que lleva la luz natural hasta el interior.
4. Una decoración impersonal
Un baño grande y perfectamente decorado muestra una imagen espectacular desde el punto de vista estético. Pero todavía puede presentar áreas de mejora. Por ejemplo, es posible que el cuarto tenga un look impersonal que se percibe en la ausencia de detalles con un significado propio.
El valor de la ornamentación es especialmente visible en el salón, el comedor, el dormitorio o el recibidor. Pero los pequeños matices también embellecen la estética del baño. Y conviene recordar que un espacio grande ofrece muchas opciones.
5. Un baño excesivamente recargado
Algunos errores muestran que, con frecuencia, es difícil encontrar un equilibrio en la balanza entre dos elementos opuestos. Previamente hemos hecho referencia a que una estancia demasiado vacía parece que todavía no está completa. ¿Pero qué ocurre cuando el resultado final se distancia de este enfoque? En ese caso, es frecuente que el punto débil de la decoración sea, precisamente, que está muy recargada con multitud de elementos. Y es difícil clarificar cuál es el verdadero punto focal.
En esa circunstancia, se producen interrupciones que reducen el nivel de protagonismo de ese punto focal que es tan esencial en cualquier habitación de la casa. Es difícil mantener el foco en lo importante cuando el espacio proyecta una sensación de desorden visual y de caos.
Por tanto, existen errores frecuentes en la decoración de baños grandes que no lucen su mejor versión como consecuencia de esas pequeñas imperfecciones.