Como comentaba hace unos días, las alfombras y moquetas no solo son para el invierno. Dependiendo del material del que estén hechas, pueden ser un confortable y atractivo complemento para las habitaciones, también durante la primavera y el verano. Pero hoy vamos a rizar el rizo, y vamos a dar un paso más: hablamos de las alfombras para exterior. ¡Sí, existen! Y son tan bonitas como la de la fotografía. Su presencia ayuda a generar en el exterior la misma sensación ambiental de cualquier salón o comedor de interior. ¿A que no sería lo mismo esta terraza, sin el detalle de la alfombra?
Aunque en un principio estas alfombras parecen similares a las de interior (ésas que están fabricadas con materiales como sisal, fibras de coco o algas marinas), en realidad son de algo mucho más resistente…
La alfombra para terraza de la esta fotografía, en concreto, está hecha de fibras de vinilo (el mismo material que se emplea para fabricar suelos continuos de interior) trenzadas, y su confección y color hacen que se asemeje muchísimo a las moquetas de fibras naturales antes mencionadas. Por supuesto, también puede colocarse en interiores; sobre todo en zonas húmedas como cocinas o baños, donde aguantará las “mojaduras” sin ningún problema.
Este modelo lo comercializa la firma británica The Garden Store Salcombe y es impermeable, anti-deslizante y resistente a los rayos UV. Y por si fuera poco, también es muy sencilla de limpiar: basta con darle un buen baño con la manguera y ponerla a secar. La alfombra de la imagen tiene unas medidas de 110 x 60 centímetros, pero también se pueden encargar piezas a la medida. Si quieres renovar tu terraza por poco dinero y convertirla en un agradable comedor al aire libre, encontrarás esta alfombra en la página web de la firma.