Las alfombras son maravillosas; a mí, por lo menos, me vuelven loca. Tanto las más mullidas y cálidas, perfectas para descansar ante una chimenea crepitante en invierno, como las más frescas y agradables destinadas a los días veraniegos. Hoy día hay cientos de diseños llenos de originalidad destinados a satisfacer a cualquier usuario, por muy especial que sea.
Además y como podéis ver en esta imagen, las alfombras también pueden servir para decorar paredes. ¿Por qué no? Sus bellos colores y fantásticos diseños hacen las veces de grandes cuadros, y además aportarán un toque muy original a las estancias.
Un sello a gran escala
La alfombra que aparece en las primeras fotos es un diseño súper divertido: un sello fucsia con la imagen de la Reina de Inglaterra, tamaño XXL. Es perfecta para un salón luminoso en tonos blancos y madera clara, por ejemplo, y puede colocarse en el suelo o la pared. Con respecto a esto, no dudéis en probar qué tal queda esa alfombra tan bonita, para la que no tenéis sitio en el suelo, como lienzo decorativo: puede ser una idea genial. Y lo mismo rige para los felpudos de las puertas…
Con agujeros, de animales y artísticas
En las imágenes que os muestro en el post y la galería podéis ver diferentes diseños, que he seleccionado por su originalidad. Todos ellos son actuales y están a la venta. Por ejemplo, las alfombras de plástico Pappelina Vera, que podéis ver en la foto central en su versión negra: con un amplio agujero en su centro, son perfectas para el verano y también para dar un toque “abstracto” al suelo del salón. ¿Y qué me decís de estas alfombras de animales para niños? Son súper divertidas y de lo más originales. Además, actualmente tenéis también la opción de escoger alfombras de pelo con impresiones clásicas, diseños inspirados en el arte moderno (Kilmt es uno de los artistas que mejor se adaptan a este formato)… Todo un mundo por descubrir.
