El turquesa siempre ha sido uno de mis colores preferidos. De hecho, una parte de mi casa está decorada en esta tonalidad, en combinación con blanco. Sobre esta base neutra resalta muchísimo y, además, aporta un toque muy elegante y sereno a las estancias. También con un punto de alegría muy recomendable. Por eso hoy quiero centrarme en esta tonalidad para ver algunas ideas de decoración en turquesa. ¡Quizá te enamores!
El turquesa en las paredes
Una primera idea que te propongo consiste en introducir el turquesa en tus paredes. Si optas por una gama suave puedes ponerlo en todas. Pero si te apetece un turquesa más vivo lo más aconsejable, para no saturar la estancia, sería que lo incluyeras solo en una y dejaras el resto en blanco o en un beige o un gris muy clarito. O si lo prefieres, puedes poner un papel pintado con algún estampado en esta tonalidad. Y lo mismo, si es muy intenso mejor dejarlo en una pared. Así tampoco empequeñecerá visualmente los espacios.
Muebles en color turquesa
Otra opción pasa por dejar las paredes blancas (o en un tono muy claro si el blanco no te gusta especialmente) y colocar muebles en color turquesa. Puedes poner una estantería, el sofá, los sillones, los armarios de la cocina, las sillas o alguna cómoda, por ejemplo. Si te apetece restaurar algún mueble puedes ser un color chulísimo para pintar una madera desgastada e introducirlo en una decoración vintage. En estos dos ejemplos, diferentes entre sí, queda muy bien.
Turquesa combinado con otros colores
Pero no solo puedes combinar el turquesa con blanco. De hecho, permite introducir otros colores que se complementan muy bien con esta tonalidad. El amarillo es uno de ellos. Le da un toque de viveza y alegría, sobre todo si empleas un turquesa suavecito. También queda muy bien en ese caso el fucsia, por ejemplo. En la galería de fotos verás algunos ejemplos.
Elementos decorativos en turquesa
También puedes dejar una decoración neutra como base e introducir pequeños detalles decorativos en color turquesa. Por ejemplo en los textiles, los cojines o edredones del dormitorio, en las toallas del baño, poniendo unas flores, con cuadros y láminas o introduciendo cualquier otro objeto que te apetezca usar de este color. Si la base es clara, blanca por ejemplo, va a resaltar un montón y proporcionará una sensación acogedora y agradable a la estancia.
El turquesa en el baño
El cuarto de baño es una estancia que admite genial el turquesa ya que es un tono que evoca a ese mar transparente y cálido del Caribe. Le da un toque muy alegre a este lugar. Puedes optar por azulejos para las paredes, dejando una mitad en turquesa y la otra blanca, o con una cenefa, o puedes colocar las toallas y demás elementos del cuarto de baño en este color. Incluso te animaría a poner un jarrón turquesa con unas flores rosas, ya verás qué contraste más bonito.
Galería de imágenes con más propuestas protagonizadas por el turquesa
Ahora vas a poder ver más ideas de cómo introducir el turquesa en la decoración de tu casa. Como comprobarás, le sienta de maravilla a cualquier estancia, desde la cocina pasando por el salón hasta el dormitorio y el cuarto de baño. Combinado con blanco, cremas o con colores más intensos, el resultado es siempre especial. Para mí es uno de los tonos que más me gusta para decorar, pero ahora debes ser tú quien opine. Descubre las distintas opciones y piensa si quedaría bien en tu casa. ¿Dónde y cómo lo emplearías?