Las fotos siempre son decorativas. Nos ayudan a recordar momentos y personas y quedan bien en cualquier lugar donde las pongas. Siempre nos saca una sonrisa ver aquella escena divertida o evocar aquel viaje, por eso en tu casa no deben faltar nunca. Hay muchas maneras de colocar las fotos. Con marco, sin marco, o sujetas de alguna forma original.
Hoy te quiero enseñar a hacer una manualidad que te ayudará a colocar tus recuerdos de una manera muy colorida y decorativa. Se trata de confeccionar un portafotos, o varios, elaborados con fimo, esa pasta que puedes moldear y que después se endurece. Te cuento todos los pasos a continuación, ya verás qué fácil es.
Los materiales
Este DIY lo he visto en el blog Make and Tell y para hacer el tuyo propio vas a necesitar los siguientes materiales:
– Fimo. También se llama pasta polimérica. El tiempo de secado puede variar de un fabricante a otro, incluso hay algunas pastas que no necesitan horno para secarse y se pueden secar al aire.
– Moldes para cortar. Pueden ser de galletas, por ejemplo. Aquí han usado con formas cuadradas, aunque puedes emplear las que prefieras. Eso sí, ten en cuenta que tiene que quedarse apoyado en alguna superficie, por lo que ha de tener una base suficientemente grande como para que no se caiga.
– Un cúter y pintura.
Cómo hacer tu portafotos, paso a paso
Lo primero que vas a hacer es poner una hoja de plástico para proteger la superficie de trabajo. A continuación, despliega el fimo hasta que tenga unos 1,5 centímetros de espesor.
Cortar el fimo
Ahora, con el cortador grande, recorta un cuadrado, y después introduce el cortador pequeño en el centro. Con este cortador pequeño todavía insertado, haz un corte, con cuidado, en la parte superior del cuadrado grande, hasta la mitad de los laterales más o menos. Mantén dentro el molde pequeño para asegurarte de que el cuadrado grande no se aplana cuando aprietas para cortar esta ranura. Después, retira el molde pequeño y alisa los bordes de tu figura con un poco de agua.
Pintar el portafotos
Ya tienes lista la base de tu portafotos. Ahora toca personalizarlo. En este caso han hecho un diseño en diagonal. Para ello, coloca cinta de carrocero haciendo una división en dos mitades y pinta una de las partes con pintura acrílica. Cuando se haya secado, hazlo mismo en la otra mitad, utilizando un color diferente. Una vez esté seca por completo, coge un rotulador permanente y dibuja pequeños patrones en estas dos mitades.
En esta propuesta emplearon una base negra con puntitos blancos y otra verde con puntitos negros. También hicieron otro portarretratos en rosa y azul. De lo que se trata es de que personalices totalmente tu manualidad para que se adapte a la decoración de tu vivienda, para que contraste mucho y resalte o para que combine con los colores que la rodean.
Colocar las fotos
Ya tienes listo tu portafotos. Debes asegurarte que las marcas de rotulador ya están secas también, y solo tendrás que insertar tus fotografías en la ranura que hiciste antes con el cúter. También puedes poner alguna lámina o frase inspiradora, puedes poner lo que te apetezca.
Los pasos, en imágenes
Por si te ha quedado alguna duda de cómo hacer este portafotos de fimo te dejo con una galería de imágenes con todas las fotografías que ilustran, paso a paso, el proceso de creación de esta manualidad. Te invito a que los hagas de distintas formas y variados colores, y así conseguirás una decoración única para colocar tus fotos preferidas por toda la casa.