Cualquier momento y lugar puede ser bueno para relajarse. Escuchar música tranquilamente, leer un libro o, simplemente, no pensar en nada. Hoy te propongo una manualidad perfecta para diseñar ese asiento especial donde poder disfrutar de tu tiempo de relax. Se trata de una hamaca colgante, ideal para colocar en un rincón dedicado a la relajación que puedas tener próximo a una ventana para disfrutar de una buena iluminación natural. Vamos a ver cómo puedes hacerla, podrás pasar buenos momentos en ella…
Los materiales que necesitarás
Este DIY lo he visto en el blog A Beautiful Mess y para fabricar la hamaca han usado materiales lo suficiente fuertes y resistentes como para soportar unos 90 kilos de peso. Así que es perfecta tanto para niños como para adultos.
– 1 varilla de madera de unos 3 centímetros de diámetro por unos 90 de longitud. El roble, por ejemplo, es una madera resistente.
– Una cuerda de polipropileno trenzado de unos 4 metros de largo.
– Una lona lisa de unos 2 metros cuadrados.
– Dos mosquetones para sujetar la cuerda al techo y a la lona.
– Pintura negra para tela.
– Brocha para pintar.
– También necesitarás tijeras, máquina de coser, plancha y taladro.
Primeros pasos
Dobla la tela por la mitad y ponla plana, haciendo un pliegue en el lateral izquierdo. Mide unos 17 centímetros desde el borde superior derecho y marca. Con una regla, dibuja una línea desde esa parte superior, marca en la esquina inferior derecha y corta a través de ambas piezas. Abre el lienzo. Después, dobla el borde superior algo más de un centímetro y plancha. Vuelve a doblar y vuelve a planchar. Cose la parte inferior del pliegue y repite con el borde inferior más largo.
Sujetar la cuerda
Después, gira la tela 90 grados hacia la izquierda para que el borde más largo quede a la derecha. Vas a crear unos bolsillos para que la cuerda se deslice a través de cada lado. Dobla cada esquina aproximadamente unos 4 centímetros y plancha, luego doblar el borde superior un poco más de un centímetro y vuelve a planchar. Luego te dejo todas las imágenes del proceso para que lo veas paso a paso, te quedará más claro…
Pintar la lona
A continuación, cose a lo largo del borde inferior que has plegado y repite en el otro lado. Haz una marca de 5 y 10 centímetros en los dos extremos de la varilla y perfora. Coloca la lona sobre un cartón para que tenga una base sólida y pinta el diseño que más te guste. Si no te apetece pintar, puedes hacer la hamaca con una tela ya estampada.
Atar la cuerda y colgarlo
Para atar la cuerda, lo mejor es que te fijes en las imágenes de esta manualidad, para que veas dónde se han hecho los nudos. Encuentra el centro de la cuerda por la parte superior de la barra de madera y haz otro nudo. Une la cuerda con los mosquetones y sujeta del gancho que hayas atornillado en tu techo. Asegúrate de que todos los nudos están bien hechos y firmes para que el asiento quede recto y estable. Puedes poner un cojín en su interior para que sea más confortable.
Galería de fotos
Como te he comentado antes, te dejo con las imágenes del proceso, realizadas por Rachel Denbow, para que veas paso a paso cómo confeccionar esta hamaca. Recuerda que no sirve para columpiarse, sino para estar tranquilamente sentado o para un balanceo suave. También deberás jugar con la longitud de la cuerda para que cuelgue más o menos del techo. No la pongas muy alta para que no sea muy complicado acceder a ella…