Las chimeneas son para el invierno pero durante todo el año pueden, y de hecho deberían, estar decoradas como parte esencial del salón o de la estancia donde estén ubicadas. Aunque no desprenden calor en estos meses de verano, se convierten en parte fundamental del interiorismo de tu hogar, puesto que suelen ser el punto focal y, por eso, es importante que prestes atención a su decoración.
Hoy vamos a repasar varias ideas para que vistas tu chimenea de una manera única, que no resulte algo aburrido sino que muestre parte de tu personalidad en este espacio dedicado a la relajación. Las hay que por sí solas ya son muy decorativas pero, si no es el caso, con estas propuestas lograrás darle un toque especial a la tuya.
Repisa superior
Una de las formas más habituales de decorar una chimenea es aprovechando la repisa superior que suelen tener casi todas ellas. Aquí existe total libertad de elección, aunque nuestra recomendación pasa por recargar en exceso el espacio. Puedes poner alguna figura, un marco de fotos, una lámina apoyada sobre el estante, unas bonitas piedras, velas o unas flores.
Espejos
Otro modo de dar mucho protagonismo a la zona de la chimenea es colocando un espejo sobre ella. Quedará genial si tiene un tamaño grande y un marco ancho para que acapare todas las miradas.
Cuadros
La alternativa al espejo es un cuadro, también de gran tamaño, encima de la chimenea. Puedes optar por colgarlo en la pared o por apoyarlo en la repisa, que también resulta muy decorativo y bonito. Si lo cuelgas no lo pongas excesivamente alto, si no no será posible disfrutar de la belleza de la imagen.
Cuadros pequeños de distintos tamaños
También puedes colocar varios cuadros o fotografías más pequeñas en lugar de un cuadro o espejo enorme. Ponlos de diferentes tamaños para crear dinamismo, con marcos en este caso más finos y no tan llamativos, para poder diseñar una composición donde las imágenes sean las protagonistas. Como te decía antes, puedes colgarlos en la pared que queda sobre la chimenea o dejarlos apoyados.
Chimeneas con el interior decorado
Una idea que me gusta mucho es la que consiste en aprovechar el hueco de la chimenea para diseñar una bonita decoración. Esto es muy útil si tu casa tiene chimenea pero nunca le enciendes, o si solo la empleas en invierno y, tras limpiarla bien, decides darle un uso decorativo durante el resto del año. Puedes colocar libros, unos troncos de madera, una figura, unas piedras decorativas, unas velas, una maleta vieja, un cesto de mimbre… Lo cierto es que queda muy original y darás vida a un espacio al que quizá no estés sacando todo el partido y tengas desaprovechado.
Velas
Aunque en la chimenea ya te tenemos fuego, unas velas en la repisa ayudarán a darle movimiento a tu decoración. Si colocas varias de distintas alturas la mirada se dirigirá hacia arriba y visualmente la chimenea parecerá más grande.
Flores y plantas
Otro modo de añadir movimiento a este lugar es a través del uso de plantas o flores. Puedes poner un ramillete de flores silvestres, una planta sin flor o una flor suelta con un tallo largo. Asimismo, te servirá para aportar color y alegría a tu decoración.
Eventos especiales
No cabe duda de que la Navidad es la época del año por excelencia para decorar las chimeneas. Es el lugar por el que Papá Noel vendrá a visitarnos y debemos vestirlo para la ocasión. Coloca guirnaldas y unos calcetines decorativos colgados de la repisa para que todos sepan dónde buscar sus regalos.