¿Te has mudado a un nuevo hogar y necesitas decorar tu dormitorio al completo? ¿Tu habitación ha quedado anticuada y necesita urgentemente una renovación? ¿Te apetece darle un cambio de aires a esta importante estancia de tu hogar? Pues antes de ponerte manos a la obra, debes saber que es igual de importante escoger las piezas adecuadas (teniendo en cuenta factores como el estilo, colores, dimensiones, materiales…) que distribuirlas en el espacio. Y es que, aunque aciertes con la elección de los muebles, no lograrás un dormitorio cómodo, funcional y estiloso si no los colocas en el espacio de manera correcta.
Para echarte una mano con la decoración de tu dormitorio, hoy en Decorablog queremos darte las claves para distribuir los muebles en la estancia. ¿Te gustaría acompañarnos? ¡Te aseguramos que la información que vamos a proporcionarte a continuación te resultará de gran ayuda!
Toma medidas
Antes de comprar ninguna pieza de mobiliario para tu dormitorio es importante que tomes medidas, ya que tu elección dependerá mucho de los metros cuadrados disponibles. Lo que nosotros te recomendamos es que hagas un plano a escala incluyendo todos los elementos estructurales que puedan influir en la distribución, como puertas ventanas, enchufes, radiadores… Una vez tengas listo el plano, podrás pensar en qué muebles quieres colocar en la estancia, siempre teniendo en cuenta que deberás dejar espacio de paso entre muebles, especialmente en la zona de entrada y en la que estás situada frente al armario.
Decide la cantidad de muebles de la estancia
Como te decíamos, una vez tengas listo el plano a escala con todos los elementos estructurales, deberás decidir el número de piezas que vas a incluir en la estancia. Si dispones de pocos metros cuadrados, deberás incluir tan solo los muebles fundamentales: cama, mesitas y armario. En cambio, si tienes espacio suficiente, también podrás colocar muebles y piezas auxiliares como cómodas, percheros, sillones, baúles, bancos… Lo importante es que no sobrecargues el ambiente, ya que esta estancia debe ser un lugar que transmita paz y armonía para facilitar el descanso.
Dónde colocar la cama
La cama es la pieza central del dormitorio, a partir de la cual girará toda la decoración. Por tanto, será el primer mueble que deberás colocar en el plano. Lo que nosotros te recomendamos es que sitúes la cama de manera que no quede pegada a la ventana. Además, no es buena idea colocar la cabecera bajo ésta por cuestiones de seguridad y para evitar posibles ruidos externos, si bien es cierto que esta alternativa es muy acertada estéticamente. Por otro lado, es preferible que la cama no quede frente a la puerta para preservar la intimidad y evitar corrientes de aire. Además, si sueles ver la televisión desde la cama, algo que no es muy recomendable pero que mucha gente suele hacer, deberás tener en cuenta las ventanas para que los brillos y los reflejos no te impidan ver bien la pantalla. Por otra parte, aunque lo habitual es colocar la cabecera de la cama pegada a una pared, si tienes metros cuadrados de sobra podrás separarla y, si quieres, colocar algún mueble detrás. Eso sí, independientemente del espacio disponible, lo importante es que haya 80 centímetros de paso alrededor de la cama.
El resto de piezas
Cuando hayas escogido el lugar que ocupará la cama, entonces podrás distribuir el resto de muebles, comenzando por el armario, que es la pieza que más espacio ocupa. Lo más recomendable es colocarlo lejos de la puerta para no entorpecer el paso. Además, si vas a optar por armarios con puertas abatibles, deberás tener en cuenta el espacio que éstas ocuparán al abrirse. En cuanto a las mesitas, es preferible que cuenten con espacio libre alrededor para que el dormitorio no parezca saturado. Por último, queremos recomendarte que no entorpezcas el paso de la luz con muebles y complementos.