La Provenza es una región histórica y cultural de Francia, bañada (al sur) por las aguas del Mediterráneo. Y, con el permiso de París, la Provenza es uno de los destinos turísticos por excelencia en el país galo.
Una región muy famosa por sus campos de lavanda, sus viñas, sus huertos y sus árboles de olivos. Un paisaje inspirador que culmina con unas impresionantes casas palaciegas que son el ejemplo perfecto de arquitectura provenzal. En Decorablog os gustan tanto estos paisajes, que hemos querido dedicar un artículo a una casa inspirada en la Pronvenza.
Riqueza arquitectónica y cultural
Si alguna vez has tenido la oportunidad de visitar cualquier pueblo de la Provenza, seguro que te ha sorprendido la gran riqueza arquitectónica y cultural de esta región.
La arquitectura provenzal conserva un importante legado del Imperio Romano, con una rica colección de monumentos de esta época, además de monasterios cistercienses del período románico, palacios e iglesias medievales y fortificaciones de la época de Luis XIV. Es, verdaderamente, un viaje a través del tiempo. Historia viva contada por cada uno de sus edificios, que son todo un reclamo turístico. Sin olvidar tampoco la extraordinaria ubicación de sus pueblos, muchos de ellos sentados en colinas.
Así que, como era de esperar, estas épocas históricas también se aprecian en el interior de las viviendas de la Provenza, que tienen una gran riqueza decorativa. Si tenemos que resumir este estilo, podríamos decir que es un rústico romántico con acento clásico.
Aires rústicos
El estilo rústico es protagonista, teniendo en cuenta la importancia de los campos de cultivo que rodean a las viviendas tradicionales de esta región. Así, destacan sobre todo los colores tierra en diferentes gamas cromáticas, las piezas de cobre que decoran las tradicionales cocinas de la Provenza y los muebles robustos de madera noble decapada que ponen ese toque rústico y campestre a la decoración. En los exteriores, los muebles de hierro forjado y ratán y las flores de lavanda visten el ambiente con romanticismo rústico.
Piezas clásicas
Pero no debemos olvidar que estamos en Francia, así que iconos clásicos de este país tampoco faltan en las casas de la Provenza. Por ejemplo la silla medallón, pieza de estilo clásico que fue realizada por el parisino Louis Delanois en 1769. Así como la lámpara de techo chandelier que viste con sofisticación el ambiente. Piezas clásicas y atemporales que ponen el toque sofisticado a la decoración rústica, logrando así el equilibrio perfecto.
Al principio del artículo hablábamos también de la presencia de monumentos del Imperio Romano en muchos edificios de pueblos de la Provenza. Y es que el paso de los romanos también se aprecia en el interior de sus viviendas, con esculturas y monumentos que recuerdan a esta época.
Suelos y paredes
En cuanto a los suelos, destacan principalmente las formas geométricas y los mosaicos que están presentes en las baldosas de terracota, así como los suelos de madera noble que aportan calidez al ambiente. En cuanto a las paredes, colores como el beige, el crema, el marfil y similares aportan luminosidad y elegancia a las casas provenzales.
Casas muy naturales
Por supuesto, tampoco faltan las referencias a la naturaleza presentes en los textiles y también en materiales como la piedra, el mármol, el barro, el mimbre, el ratán y otras fibras naturales. Es decir, superficies robustas y elegantes que tienen un irresistible encanto natural, pero que combinan a la perfección con piezas de estilo clásico y sofisticado, tan tradicionales en la decoración francesa, como pueden ser los muebles con patas torneadas y la icónica silla cruceta. Todo ello, perfumado con flores de lavanda tan características de la Provenza.
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