Seleccionar un papel pintado para revestir las paredes de una estancia del hogar no solo tenemos que tener en cuenta la cuestión estética. Es evidente que el diseño nos debe gustar y conjuntar con el resto de elementos de la decoración. Pero es necesario considerar la textura, el estampado y el color ya que pueden alterar la percepción espacial de la estancia. Es por eso que antes de elegir un papel, es recomendable tener en cuenta las dimensiones de la habitación, la altura, su iluminación y el efecto que los diferentes dibujos o estampados causarán en la misma.
El papel pintado se puso de moda hace unos años y ahora ha resurgido como una buena opción decorativa. Actualmente podemos encontrar una gama extensa y variada de acabados, colores y diseños. Desde papeles impresos con grandes dibujos hasta los de tonalidades más oscuras o cálidas, pasando del rojo al amarillo, con propuestas realmente novedosas. Sin embargo, debemos tener en cuenta que en las habitaciones donde se colocan, restan luminosidad y visualmente simulan espacios más pequeños. Es por eso que el papel pintado se orienta más para habitaciones de grandes dimensiones o con unas condiciones lumínicas óptimas, preferiblemente con buena entrada de luz natural.
Los papeles con tonalidades pastel o con motivos pequeños pueden llegar a aumentar la sensación de amplitud de las habitaciones donde se colocan. Los papeles rayados en forma horizontales son otra buena opción ya que amplían los ambientes en el sentido de las líneas del diseño, el efecto en una habitación es la de ensancharse y aumentar de espacio. En cambio, si las líneas son verticales, se consigue una sensación de mayor altura. Evidentemente la habitación tendrá el mismo espacio, pero la percepción será muy diferente.
Para dormitorios recomendamos los papeles de colores fríos con tonalidades al poder ser verdes, violetas o azules, para dar un efecto de amplitud. También se puede tener en cuenta el blanco como una propuesta más clásica, ya que amplia los metros cuadrados de la estancia y capta mucho mejor la luminosidad solar. En el salón podemos jugar con más opciones, es posible emplear papeles de diversas características, siendo sin duda la estancia más libre ya que admite diferentes variantes de color según el tamaño, el mobiliario y la decoración.