Hoy en día los cables son más un engorro que otra cosa. Está avanzando la utilización de los productos inalámbricos para prescindir de ello. Sin embargo, podemos no resignarnos y pensar que esos molestos cables pueden servirnos para decorar las paredes de nuestro hogar.
La idea la tenéis plasmada en las dos imágenes que os mostramos. El alambre flexible y las fijaciones de cable imitan el marco de una chimenea en este caso. Si tenemos en cuenta que eso mismo lo podemos hacer en cualquier habitación, podemos prescindir de los vinilos para empezar a utilizar los cables para la decoración. Seguro que tus hijos agradecerán mucho tu imaginación si eres capaz de crear un animal con los mismos.