Tener la casa limpia es imprescindible para mantener sana a nuestra familia y para poder vivir cómodamente. Sin embargo, hoy en día tenemos tantas cosas que hacer que se nos hace difícil encontrar un hueco para limpiar y organizar cada estancia del hogar.
Por suerte, han aparecido algunos productos que nos permiten tener la casa en perfecto estado de una forma más rápida y sencilla que hace unos años. Además, podemos recurrir a algunos trucos que nos facilitarán aún más las tareas de limpieza, logrando que nuestra casa se mantenga resplandeciente durante más tiempo. ¡Te contamos algunos de ellos a continuación! ¡No te lo pierdas!
Los cristales
Vamos a comenzar hablando de los cristales, que por mucho que los limpiemos siempre parecen sucios, especialmente si hay niños en casa. Un buen truco para que las ventanas, las balconeras y el resto de cristales de la casa estén siempre resplandecientes es utilizar unas medias en lugar de un trapo o papel de cocina a la hora de limpiarlos. ¡Sí! ¡Sí! ¡Tal y como lo estás leyendo! Si se trata de unas medias finas y se pasan siempre en la misma dirección no se quedarán marcas en los cristales. Si no encuentras medias por casa, también puedes utilizar un periódico viejo y vinagre. Además, te recomendamos que limpies los vidrios en días nublados para que los productos de limpieza no se sequen antes de que puedas terminar de limpiar.
El suelo
Como el suelo también se ensucia muy fácilmente, vamos a proponerte un truco que tiene mucho que ver con el anterior. Y es que también deberás hacerte con unas medias de nylon. En este caso, deberás colocarlas al cepillo de la escoba para recoger hasta la suciedad que no se ve. En canto a los suelos de madera, te recomendamos mezclar agua, limón y suavizante en el cubo de fregar. De esta manera, tu suelo quedará totalmente brillante.
La cocina
La cocina es, sin duda, la estancia de la casa que más se ensucia, sobre todo si cocinas a menudo. Por eso, es importante conocer algunos trucos que te faciliten las tareas de limpieza. Así, lo primero que te recomendamos es que, antes de cocinar, coloques papel de aluminio en la parrilla para que la grasa o el aceite caigan sobre el papel. En cuanto a los electrodomésticos, te recomendamos que limpies los soportes con agua caliente y detergente y el interior con una esponja con jabón y agua; el microondas con una bayeta con jabón; y el horno con desengrasantes específicos.
El baño
Como la cocina, el baño también necesita una limpieza regular. Así, además de limpiar los azulejos, de los que te hablaremos a continuación, te recomendamos verter bicarbonato de sodio una vez a la semana por los sumideros para deshacerte de los malos olores y de los atascos. Además, es buena idea que pongas un poco de vinagre en los inodoros antes de irte a dormir para que al día siguiente estén impecables. Para limpiarlo a fondo, es buena idea utilizar lavavajillas y una mezcla de bicarbonato. Y para evitar la cal, lo mejor es que dejes los grifos y las mamparas sin gotas cuando estén húmedas.
Los azulejos
Por otro lado, para los azulejos del baño o la cocina recomendamos utilizar un cepillo de dientes, con el que lograrás alcanzar todos los rincones, eliminando toda la suciedad que se acumula en las juntas. Para la superficie te bastará con una esponja o una bayeta. Respecto al baño, podrás eliminar las marcas de agua con vinagre blanco o con el vinagre de vino que se utiliza para cocinar. Otros productos que te servirán para limpiar azulejos son el amoniaco, que deberás diluir en agua; y limpiacristales, que te ayudará a sacar brillo a las paredes.
El polvo
En cuanto al polvo, te recomendamos que ventiles la casa antes de limpiarlo, algo que te recomendamos hacer con una mezcla de agua, vinagre blanco y un poquito de aceite de oliva. Por otro lado, es mejor que comiences por las zonas altas para que no vuelvas a ensuciar lo que ya está limpio. Después, pasa el aspirador y a continuación friega. Piensa que al mojar el suelo lograrás eliminar el último resto de suciedad.
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