El living es una de las habitaciones de la vivienda donde más tiempo se pasa. Se trata de un espacio de divertimento, por lo que ha de ser práctico, cómodo y muy acogedor. Allí es donde recibirás a los amigos, te sentarás a leer el periódico o a ver la televisión, por lo que la decoración ha de cuidarse mucho. Sigue leyendo y descubre algunas ideas para ambientar esta estancia de la casa.
Al igual que el resto del hogar, el living ha de ser un espacio personal. Eso se consigue mediante una buena elección de las cortinas, el colorido de la sala y objetos accesorios como portarretratos donde coloques fotografías que inspiren buenos recuerdos.
Muebles, pintura e iluminación
Si quieres darle un toque original al living hazlo mediante el color de sus paredes. Pinta tres de ellas de un tono claro y la pared central de un color que contraste con el resto. Así le conferirás mucha más fuerza a la estancia.
Tener un buen lugar para sentarse es fundamental en los living. Escoge sillones y sofás que sean amplios. Si el living no es demasiado grande, pega estos muebles a la pared para que dé una sensación de amplitud. Además, sería mejor que los compraras con grandes reposabrazos. Así si en un momento dado recibes a más gente de la esperada, podrás invitarlos a sentarse ahí.
Las mesitas auxiliares son ideales para estas estancias. Sirven para dejar los vasos o los platos de aperitivos. Y nos pueden sacar de un apuro más de una vez. Si estás reunido con los amigos no hace falta que vayas continuamente a la cocina, ya que podrás dejar los platos en las mesas auxiliares.
Las cortinas visten mucho y personalizan la sala. Si lo que buscas es más luminosidad, pon unas que sean de tela muy fina y colores claros. Es más, para los que quieren que el living sea más acogedor, cómprate una alfombra de diseño y colócala debajo del sofá y deja a la vista una parte de ella. Convertirás la sala en una habitación más personal.