Con la importancia que tiene y lo poco que lo valoramos. Sí, nos referimos al recibidor, la carta de presentación de nuestra casa, que debería recibir la misma atención y esmero en su decoración que el resto de estancias. De hecho, debería recibir más atenciones, ya que normalmente se trata de espacios pequeños y poco luminosos.
Teniendo en cuenta que es lo primero que ven nuestros invitados (ya sabes lo que dicen, la primera impresión es la que cuenta) y que es el espacio que nos recibe cada día al volver del trabajo y lo último que vemos al salir de casa, deberemos darle la importancia que se merece. Sobre todo, es esencial no caer en los típicos errores decorativos de siempre. Te hablamos de ellos para que no los vuelvas a cometer.
Ni demasiado recargado ni vacío
Para que tu recibidor no dé una primera impresión equivocada, es importante que no recargues la zona. Debes tener en cuenta que este espacio suele contar con muy pocos metros cuadrados y que muchos muebles y accesorios podrían provocar una sensación de agobio. Eso sí, tampoco puedes dejar el espacio vacío, por mucho que te decantes por el estilo minimalista, tan de moda en los últimos años. Por tanto, lo ideal es que escojas elementos acogedores que consigan un equilibrio.
Poca iluminación
Otro error típico en esta zona del hogar es colocar poca iluminación, y eso que es uno de los aspectos clave en la decoración del recibidor. Eso sí, tampoco deberás poner una luz muy intensa.
Colores oscuros
Por último, no debes caer en el error de decorar tu recibidor con colores oscuros, ya que, en general, esta zona suele ser oscura por la ausencia de ventanas y este tipo de tonalidades podrían empequeñecer visualmente el espacio. Así, intenta evitar el negro, grises o marrones. En su lugar, decántate por colores claros y luminosos, como el blanco o el beige.