Por fin hemos dicho adiós al 2013 y con él a los malos augurios del dichoso número y las malas noticias económicas. Pero para comenzar el 2014 lleno de buen rollo nada mejor como dejar que las buenas vibraciones del Feng Shui entren en tu casa. Y lo mejor es dejar que la energía empiece a fluir por tu cocina, que a pesar de los buenos momentos gastronómicos que aporta, es la gran olvidada de los hogares.
La orientación más adecuada es el oeste, con los fogones situados en la pared sur. Si la estancia es lo svibracionesuficientemente espaciosa, la distribución ideal sería con los fogones colocados en una isla de la cocina. Pero como la estancia es la que es, hay además otros elementos a tener en cuenta para atraer la energía positiva.
El color blanco es el mejor para atraer buen Chi. La estancia debe ser luminosa, estar bien ventilada, y dar sensación de amplitud. También conseguiremos un buen efecto con colores cálidos, sobre todo si los mezclamos con detalles brillantes. Al fin y al cabo tenemos que tener en cuenta que cada color tendrá un efecto en nuestras emociones.
Atención a los fogones
Otro elemento a tener en cuenta es la ubicación de los fogones. Éstos deben estar limpios y funcionar correctamente. Además habría que colocarlos lo más lejos posible del fregadero. Lo ideal sería que estuvieran en paredes diferentes, pero si no es posible, conseguiremos solucionar las malas colocando algo de metal o de madera entre ambos, como pueden ser tarros de cocina u otros utensilios.
Además, el fogón debería estar ubicado de tal manera que la persona que está cocinando no quede de espaldas a la puerta. Si no lo podemos evitar, podemos bloquear el efecto colocando un espejo sobre la pared del fogón. Así veremos qué sucede detrás y según la filosofía oriental aumentarán las posibilidades de éxito de los ingresos familiares.
En cuanto a los muebles, debemos escoger los de madera natural o los que tratan de imitar este material. Además, la fruta y las flores frescas aumentarán el flujo del Chi. Un buen Feng Shui exige siempre una luz natural apropiada, con luces alógenas que iluminen las zonas más oscuras.