Ellos son los reyes de la casa, y como tal, también merecen tener su espacio. Habitualmente nos esmeramos en la decoración de la habitación de los más pequeños de la casa, pero olvidamos que ellos también reclaman protagonismo en el resto de la vivienda. Una buena opción, cuando la distribución de la casa lo permita, es reservar un cuarto de baño sólo para ellos.
Al ponernos manos a la obra, lo mejor es dejar volar la imaginación y la creatividad. Hay que tener en cuenta que los baños para niños tienen que tener un aspecto muy original y divertido, pero también práctico. Sólo así conseguiremos convertir la rutina de aseo en un juego, y la hora del baño ya no será más un suplicio.
En el universo de los niños el color es el que manda. Y también será el principal protagonista a la hora de elegir la decoración del baño. Además conviene huir de la idea de azul sólo para niños y rosa sólo para niñas, algo totalmente desfasado. Lo mejor es apostar por colores llamativos y atrevidos.
Para evitar un efecto recargado hay que elegir un color base neutro y luminoso como base para las paredes y combinarlo con muebles y accesorios coloridos que contrasten. Los tonos rojos, naranjas, azules, verdes y amarillos aportaran vitalidad y originalidad al cuarto de baño. Otra opción es combinar las paredes blancas con azulejos de distintos colores que aportarán alegría.
Un buen truco será elegir una temática del agrado del niño, como pueden ser los coches, las princesas, los animales…. y hacer que el cuarto de baño recree un universo de su agrado. Podemos utilizar vinilos adhesivos, fáciles de pegar, que a buen seguro llamarán su atención.
Muebles aptos para niños
Una vez escogidos los colores, no hay que olvidar que lo más importante es que el cuarto de baño responda a las necesidades de los niños. Ellos no son tan altos como nosotros, y por ello es esencial que el mobiliario y el resto de detalles estén a la altura adecuada para que los más pequeños puedan acceder sin ayuda. Existen inodoros, lavabos y bañeras especialmente adaptados. Cuando no sea posible conseguir mobiliario adaptado se pueden incorporar banquetas y escaleritas para facilitarles el acceso.
Y si algo tienen los niños son juguetes. Por mucho que nos esforcemos en guardarlos en su habitación, lo más probable es que juegos de todos los colores terminen inundando toda la casa; incluso el cuarto de baño. Unas estanterías con varios organizadores servirán para guardar los juguetes de baño y otros utensilios de los niños, consiguiendo así algo más de orden en nuestra casa.