Dentro de la decoración y el interiorismo, es posible que una de mis preferencias sea el mobiliario. El diseño, la restauración, la distribución de los elementos… Son aspectos que requieren buen gusto, atención al detalle y equilibrio. Como sé que no están las cosas como para cambiar los muebles de la casa todas las temporadas, voy a daros algunas ideas para que renovéis y recicléis los que ya no os gusten o estén pasados de moda.
Es posible conseguir muebles preciosos con materiales baratos y poco trabajo. Basta con tener paciencia y gusto por el bricolaje… Y con echar un vistazo a las ideas de este post.
Colores vivos
Mis dos primeras propuestas pasan, sobre todo, por renovar la pintura. A la izquierda de la primera foto aparece un gran armario, de esos que solía haber en las casas en los años 50 y 60. Para renovarlo, ya que era muy pesado, se la retiró la puerta y se dejaron las baldas a la vista para guardar ropa de cama. Y atención al acabado: por fuera va pintado de azul cielo envejecido, y por dentro, de blanco radiante.
La idea de la derecha es mucho más moderna y original. Si os habéis cansado de vuestra mesilla de noche, ¿por qué no cortáis por lo sano? Literalmente: cortar la mesita por la mitad y colgarla de la pared, dejando solo dos patas. Pintada de rosa chicle, no puede ser más chic…
Mesa-banco y aparador de cajones
Estas dos fotos muestran diseños más clásicos, pero también ingeniosos. A la izquierda, una innovadora forma de usar la clásica mesa de centro con cajones: a modo de banco con espacio de almacenaje. Colocando una balda casi a ras de suelo tendréis espacio para poner unas cestas, y encima de la mesa basta con poner unos cuantos cojines. A la izquierda, un mueble de cajones se ha alzado sobre cuatro patas de horquilla para crear este fantástico aparador estilo retro. Si tenéis algún mueble parecido, no dudéis en quitarle las patas y colocarle otras más modernas: tubos cromados, de hierro… Le darán una nueva vida.