Hace unos días os explicaba cómo escoger los colores para pintar las paredes en verano, algo imprescindible si queremos renovar la decoración aprovechando al máximo la luz y la alegría de esta estación. Pero pintar las paredes no lo es todo: ¿qué sería de la decoración sin los muebles y los complementos? Vamos a echar un vistazo a todas las posibilidades que nos brindan para nuestro interiorismo veraniego.
Como podéis ver, tanto los espacios de interior como los de exterior se ven revalorizados con ideas y accesorios súper sencillos, fáciles de conseguir e incluso de hacer.
Estilo colonial y feeling náutico
Empezamos por la imagen que abre el post, en el que podéis ver dos ambientes veraniegos pero completamente diferentes. A la izquierda, un rincón de inspiración colonial que podéis lograr con plantas verdes, muebles de mimbre y cojines en tonos naranjas y rojos. En la foto de la derecha el estilo es náutico, lleno de frescura: un friso blanco con tablas horizontales, cojines a rayas, muebles en madera blanca y dos salvavidas decorativos son suficientes para un efecto 10.
Estera tropical y portavelas florales
Sobre estas líneas, dos accesorios decorativos muy fáciles de hacer que cambiarán el estilo de vuestro dormitorio y de la mesa. A la izquierda, una alfombra de arpillera que podéis hacer vosotros mismos con un trozo de este material: basta con coser los bordes y luego hacer unos bordados “tropicales” con rafia. En la otra imagen, los portavelas son sencillos vasos de tubo a los que se les ha atado una flor utilizando un trozo de rafia.
Bolsas luminosas y tumbonas a rayas
Más ideas para la mesa: podéis meter los portavelas en bolsas de papel de colores (las encontraréis en tiendas de artículos para fiestas y en papelerías), que tendréis que agujerear para dejar salir la luz. A la izquierda, tumbonas de madera con colchonetas a rayas azules y blancas: son un acierto seguro por el que no pasan los años. Las de la foto son unas fundas fáciles de hacer, con lazos en los laterales que podéis usar para cubrir las originales y darles un nuevo look.
Flores en cojines y muebles
¡Vivan las flores! En la imagen de la derecha, un banco rústico de madera color nogal se alegra con cojines blancos con flores pintadas a mano. Si utilizáis pinturas especiales para tela, bastará con plancharlos por el revés para que aguanten decenas de lavados. Y a la derecha, una mesa de madera se ha pintado con un delicado tono gris, embellecido con estarcidos en tonos neutros, también plenamente primaverales. Con esta decoración, ¿quién necesita un mantel?